El grano de dios o cómo los mayas domesticaron el maíz

Pedro-Revilla1Por Pedro Revilla (CSIC)*

El teosinte es una planta silvestre emparentada con el maíz que se encuentra en Centroamérica. Según una leyenda maya, el dios Yum Kaat creó el teosinte, palabra que en el idioma nahuatl significa «maíz de dios«. Otro mito cuenta que el dios Sol y la diosa Luna tuvieron un hijo llamado Cinteotl, dios del maíz. Cuando Cinteotl fue hecho pedazos por otro dios, de sus despojos surgieron el maíz y otras plantas cultivadas. Aunque estas narraciones no son objeto de investigación científica, lo cierto es que el teosinte ya existía cuando los seres humanos llegaron a América, así que obviamente el teosinte no fue creado por la acción humana. Lo que sí estudia la comunidad científica es la domesticación del maíz (Zea mays L.), una práctica que, según la teoría actualmente aceptada, pusieron en marcha hace unos diez mil años los pobladores de Centroamérica –posiblemente los mayas– a partir del teosinte.

teosinte

Teosinte, antecesor del maíz

La domesticación de otras especies es un proceso de selección genética continuo que se realiza por los seres humanos, de forma consciente o inconsciente, para cultivar plantas o criar animales. Volviendo a nuestro grano, las plantas de las variedades primitivas de maíz no son muy distintas de las plantas de teosinte, pero la mazorca de maíz es tan diferente de la pequeña espiga de teosinte que apenas se puede encontrar algún parentesco entre ambas. De hecho, la domesticación del maíz supuso la variación más grande entre una especie silvestre y una cultivada. Si comparamos los frutos silvestres y cultivados de muchas otras especies, observamos cambios cuantitativos y algunos cualitativos que permiten encontrar rasgos comunes. Sin embargo, entre la espiga de teosinte y la mazorca de maíz primitivo hay cambios tan drásticos –como el número de filas de grano, el número de granos por fila, la forma, tamaño y peso de los granos, la cobertura de los granos y su composición– que hacen pensar que son dos plantas no relacionadas.

variedades maiz

Variedades de maíz estudiadas en la Misión Biológica de Galicia del CSIC

Entonces, ¿cómo lo hicieron los mayas? Como en todas las domesticaciones, para el maíz eligieron solo una pequeña proporción de la variabilidad genética disponible en el teosinte, ya que seleccionaron los ejemplares que les resultaban más útiles. Por ejemplo, eligieron los granos más grandes o más blandos, o las mazorcas con más granos que no se cayesen. Aquel maíz primitivo seleccionado disponible en el teosinte ha seguido produciendo variación genética suficiente para permitir extender el cultivo desde los trópicos hasta los círculos polares, desde el nivel del mar hasta los altiplanos andinos y desde América hasta todas las tierras pobladas. Es posible que en aquella selección que tan hábilmente practicaron los mayas fuese implícita la elección de las plantas con mayor capacidad para producir variaciones genéticas. Tanto es así que la diferencia entre dos líneas de maíz actuales supera la distancia genética que hay entre seres humanos y chimpancés.

Con estos antecedentes no es de extrañar que los mayas atribuyesen el origen del maíz a la intervención divina en lugar de arrogarse todo el mérito de tan magna obra. Con todos los conocimientos y tecnologías disponibles en la actualidad, la comunidad científica aún no ha sido capaz de hacer algo parecido a la domesticación del ‘grano de dios’.

*Pedro Revilla es investigador de la Misión Biológica de Galicia del CSIC.

1 comentario

  1. Dice ser Sergio

    En el Perú tambien hay una gran variedad de maices y tambien se le atribuye a los Incas la domesticacion del maiz, solo en el Valle del Cusco se cultivan mas de 10 variedades de maiz, de todos los tamaños y colores, aun esta por determinar de donde es originario el maiz si es de mexico o del Perú.

    26 octubre 2015 | 15:18

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