No conozco a nadie, de momento, que haya acudido a una empresa de coartadas a que le resuelvan la papeleta para poder echar un polvo ajeno, sin montar un guirigay en su casa. Pero sí conozco a muchos -hombres y mujeres, incluida yo en otro tiempo- a quienes les hubiera venido de perlas una ayudita de tucoartada.com, por ejemplo o de otras compañías similares hoy tan en boga.
Aunque bien pensado, tanta previsión se puede cargar la emoción que producen las aventuras, el cosquilleo que se te pone en el estómago desde que sales de casa y el comecome con el que vuelves hasta que metes la llave en la cerradura de tu puerta y entras como si no hubiera pasado nada.
Compañías como esta, además de mentir por ti, reservan el hotel y pagan las facturas para que no queden rastros. Son unos prefesionales.
Para los que creéis que las mujeres están sólo al servicio del marido y que no follan fuera de casa, como habéis dicho algunos en otros posts, o que la gente normal no vive las historias que yo cuento aquí, os diré, por ejemplo, que el servicio estrella de otra de esas empresas de engaños, Coartadaclub es el de los seminarios de cocina para amas de casa en hoteles ficticios.
Sus responsales cuentan, según un reportaje que he leído este fin de semana, que las peticiones son muchísimas y que sus estudios de mercado demuestran que la mitad del país -mucho me parece- está dispuesta a engañar.
Dicen que por dos euros, los infieles se descargan programas, como Soundercover o Cargo, que crean coartadas acústicas para teléfono. El cliente puede hablar desde la playa y su interlocutor oirá de fo ndo el ruido de una oficina o de un atasco.
Lo dicho, un negocio.
Pero si es ahí donde radica la madre del cordero, mientras nosotros lo regalamos, vosotras lo vendéis.Para que ahora venga Chapi y nos cuente las milongas de su “amigo” el Gigoló, le has pagado tu alguna vez Chapi? Pues las otras tampoco.
30 noviembre -0001 | 0:00
Me debo haber levantado demasiado atontado hoy, espesísimo, porque leo blogs hoy y me pierdo… O se pierden los comentaristas… ¿No hablábamos de infidelidades y coartadas? ¿Qué más da que sean o no de pago?A mí me chifla que aparezcan todo este tipo de empresas, sinceramente, gentes de negocios que encuentren la oportunidad de negocio en un nicho de mercado concreto, la picaresca hecha billetitos contantes y sonantes. Aunque no le veo demasiado futuro en un país cada vez más puteado por los aumentos de las hipotecas, y teniendo en cuenta de que las infidelidades suelen caer en ámbitos muy cercanos (amistades, trabajo…), bravo por las mentes despiertas que imaginan este tipo de negocios… Diario Estupefaciente, la Novela-Blog que ha enganchado ya a más de 4.000 lectores…
30 noviembre -0001 | 0:00
Hola, pues es cierto lo que cuentas Chapi. Tengo un sexshop virtual http://www.sexshopdreams.com y en mas de dos y de tres ocasiones nos han preguntado por este tipo de servicios. Lo que mas sorprende es que eran mujeres las que lo solicitaban. Realmente y basándonos en nuestra experiencia, es la mujer la que puede solicitar mas este tipo de servicios. Es el hombre el que menos necesita de coartadas para engañar a su pareja por que estos viven en una coartada perpetua.
25 marzo 2008 | 7:09
Sí, ya funcionan desde hace algún tiempo. La gente, bueno… recurre a eso por comodidad porque echándole un poco de imaginación no haría falta.http://www.cuadernodecibersexo.com
25 marzo 2008 | 7:19
Tiene sentido que haya gente preparada para juntar a dos personas,detectives para vigilar a la pareja, abogados para los papeles del divorcio, y ahora agencias para preparar la coartada y facilitar el engaño.Estamos viviendo dentro de la novela.
25 marzo 2008 | 7:46
Este tipo de servicios son tan malos como caros.
25 marzo 2008 | 7:55
Por cierto, el titular, según lo cuentas, sería:Ser encubridor y mentiroso puede ser un negocio.Ser infiel puede ser ruinoso.
25 marzo 2008 | 7:58
Que la inmensa mayoría de los “normales” no vive la inmensa mayoría de las historias de tus “amigos” es obvio. Que la inmensa mayoría de las mujeres están al servicio del marido, pues hasta que lo está al servicio dl querido… Pero que la mitad de la población “felizmente casada” engaña o quiere engañara a su pareja, es mucho más que seguro, ya que esa mitad es varón.
25 marzo 2008 | 8:15
No engañeis… produce un stres ke te cagas!!!!Ademas de ser pecado!!!!…Pero follar con otros u otras… es otra movida!!!… y mola mazoooo!!!Y el que lo probó… lo sabe..!!!.. que dijo una vez un gran poeta que ahora nomacuerdo del nombre…
25 marzo 2008 | 9:50
Chapi, te repito que hagas tú misma la prueba (hasta puede tratarse de un reportaje). Pones un anuncio en cualquier periódico: gigoló, un hombre que se ofrece a mujeres. Te describes de la forma más sugerente que se te ocurra, y esperas. Hasta puedes ponerte tú al teléfono, pues de lo que se trata es de comprobar cuántas mujeres están dispuestas a pagar por algo así, sea delante de su marido o no.Además, basta con echar un vistazo a las páginas de anuncios de los periódicos: no hay un solo anuncio de hombres para mujeres.
25 marzo 2008 | 9:50
Leed lo que dice Antonio Salas, aquel que estuvo infiltrado en redes de prostitución (vamos, que no cuenta lo que le ha contado un amigo fantasmón, como en el caso de Chapi y el tal Salvaje):18. Hola Antonio, no he leido tu libro por lo que igual estoy preguntándote algo que ya viene en él… ¿sabes si existe el mismo panorama con hombres públicos que venden sus favores como con las mujeres? vamos, que si podemos también estar hablando de prostitutos de lujo.No, no viene en el libro, porque el libro, digan lo que digan en la tele, no es un libro sobre prostitutas famosas lleno de iniciales y bla, bla, bla. Y porque por cada hombre que se prostituye (de lujo o no) hay cien mil mujeres que son prostituidad. Quizas porque por cada mujer que va de «putos», hay un millón de varones que se van de «putas». Dejando al margen las fantasías onanistas de algunos tios, con vocación de gigoló, la prostitución es un negocio de hombres, para hombres, con mercancía femenina.6. Para cuando un libro sobre el paralelo mundo de prostitución masculina de lujo? GraciasConfieso que no es un tema que me interese tanto. Sobretodo porque no existen mafias ni redes de trata de «blancos». La prostitución, hoy por hoy, y con ella las mafias, es un negocio de hombres para hombres.
25 marzo 2008 | 9:51
«Fantasías onanistas de algunos tíos…»Es lo que le pasa al Salvaje27.(Lo de 27 supongo que es por los centímetros…)
25 marzo 2008 | 9:51
Esopo: que la mayor parte de la demanda sea masculina es obvio, pero que cada vez hay más demanda femenina, también.Mi amigo no es un fantasmón, Esopo, es un gigoló que vive de eso y tiene clientela.Es verdad que no se puede comparar el procentaje de mujeres con el de hombres que acuden a estos servicios, pero tampoco se puede negar que si hay gigolós es porque hay demandas.Ah, y yo no estoy hablando de mafias y prostitución obligada.
25 marzo 2008 | 10:37
Hola otra vez desde http://www.sexshopdreams.com no será que a las mujeres no nos cuesta tanto follar con quien nos guste como a los hombres. No nos engañemos el poder de seducción de la mujer es infinitamente superior al de los hombre. Por muy normalitas que seamos siempre habrá algún machito dispuesto.
25 marzo 2008 | 11:47
Ala, publicidad en toda la jeta. Jajajajajaja.Lo de las empresas estas a mí me parece una soberana gilipollez. Si hace falta aportar tantas «pruebas» es porque la otra persona ya tiene la mosca en la oreja, y le puede poner un investigador privado. Entonces, ¿qué hacen? ¿Le tienen un doble preparado como a Hussein o Castro?Además esta absurda forma de gastar dinero porque-no-sé-qué-hacer-con-tanto, es sólo para gente de lujosas urbanizaciones, sí, de esas que «contratan gigolós».Lo lo de los gigolós, ¿cómo que se empieza a dar «ahora»? Yo llevo conociéndo de la leyenda urbana desde que era cani, ¿no recordáis la peli de Richard Gere de los ochenta? Han pasadao ya 20 años, así que de nuevo, poco. Gigoló es el nombre fino, el coloquial es cha-pe-ro, lo que pasa que contar que uno se tira a hombres queda como…¿cómo decirlo? Muy maricón. Y es menos glamouroso. Jejeje.Ahora ya en serio, un gigoló más que un prostituto de aquí te pillo, aquí te mato, es más bien un chico joven y de buen ver, que se convierte en noviete (no hay quién se lo crea) de una mujer mayor y con dinero, mucho dinero. Y ella debe creer qué él está con ella por amor, en cuanto se da cuenta, c’est fini. Y sin polvos de despedeida ni nada. ¿Os recuerda a alguna famosa española? ¿La ola de famosas con nvoio cubano con edad de ser su hijo? Buena, también hay un mercado de gente menos pudiente. Aquí se paga con la posibilidad de obteber los papeles.Así que yo creo que las mujeres sí podrían estar dispuestas a pagar para comprar a amor, pero ¿sexo? Definitivamente no.
25 marzo 2008 | 14:53
algo relacionado con esto se publicó este domingo en el suplemento del país;yo creo que es todo mentira por una razón muy sencilla, ahora TODA españa «sabe» que existe esa web y ese negocio, es que las esposas son tontas?a ver, que alguine me diga si se cree que las esposas (o los maridos) son tontas y sabiendo que ha esa web y esas empresas a partir de ahora va a colar una coartada montada por esta gente!a ver,amiguetes, qué empresa en su sano juicio que se dedique a una actividad supuestamente discreta y casi secreta, promociona urbi et orbe sus servicios para que to zeus se entere de que aprtir de ahora las coartadas puede sen fabricadas…
25 marzo 2008 | 14:54
Veo que fino y esopos no dan su brazo a torcer en estos temas. Se obcecan en creer que las mujeres de hoy en dia solo buscamos amor, que no disfrutamos de un buen cuerpo ni queremos concedernos lujos al cuerpo. Es evidente que sabeis bien poco de nosotras. Teneis pareja, fiel y amante? Os felicito, disfrutadla por mucho tiempo y ojala esa felicidad os dure y os llene eternamente. A mí no me pasa, y si deseo acostarme con un chico joven y atractivo que me da lo que quiero a cambio de dinero lo hago y punto. La mayoría de mujeres no necesitamos organizaciones como estás para engañar a los maridos porque la mayoría de ellos no se creerían lo que somos capaces de hacer. Para alguno seguimos siendo las pobres tontas.
25 marzo 2008 | 16:11
Ni ellos ni otros muchos, Avispada. Tú misma lo has dicho, como no se lo creen, seguimos siendo nosotras la ¡pobre mujer! a la que engañaba el marido.
25 marzo 2008 | 16:43
Avispada , pues si eres una cuarentona pelleja, tendrás que pagar.Debes ser la envidia de tus amigas, oye,pagar para que te echen un polvo.Otras con plantarnos en una discoteca, tenemos candidatos de sobra.
25 marzo 2008 | 23:07
«Aunque bien pensado, tanta previsión se puede cargar la emoción que producen las aventuras, el cosquilleo que se te pone en el estómago desde que sales de casa y el comecome con el que vuelves hasta que metes la llave en la cerradura de tu puerta y entras como si no hubiera pasado nada.»ChapiEstoy de acuerdo con el comentario.Yo no he pagado aún ninguna coartada, pero a mí me salen caras las llamadas que realizo desde una gabina a un móvil ya que mi «amigo» no tiene fijo, eso sí nos ahorramos el hotel ya que él vive solo.También recuerdo algo que me dijo El Reverendo de que con el tiempo el sentiemiento de culpa es menor.Te sigo a diario aunque no comentoSaludos
26 marzo 2008 | 8:44
Creo que estamos pasando un poco por alto el hecho de que pagar por tener sexo puede constituir, en sí mismo, una fantasía, al margen de que sea o no imprescindible para finalmente consumar.
26 marzo 2008 | 12:05
Hola azucena, guapa. Me alegro de que estés ahí. Sí que es verdad que el sentimiento de culpa se atenúa con el tiempo, incluso desaparece. A mí me pasó.
26 marzo 2008 | 13:17