Vivir con menos no significa vivir peor, ni retroceder. La delicada situación del Planeta obliga a reducir nuestro impacto sobre él. Una manera es vivir de acuerdo con unos principios sostenibles que enumera Conciencia Eco:
- Consume de forma responsable: antes de comprar, piensa si lo necesitas realmente.
- Las cuatro ‘R’: hay que reducir, reutilizar, reparar y reciclar los productos.
- Ahorra papel: haz una lista con productos de papel desechable que utilizas habitualmente y piensa si puedes reducir su consumo (servilletas, pañuelos…).
- Ahorra agua: cada español consume el doble de agua que la media mundial.
- Ahorra energía: compra electrodomésticos eficientes, usa bombillas de bajo consumo Para seguir viviendo como lo hacemos en occidente necesitaríamos los recursos de más de cinco planetas como el nuestro.
- Menos contaminación: si puedes ahorrar un viaje en coche, hazlo. Usa el transporte público o la bicicleta y recuerda que el tren es el transporte más ecológico.
- Alimentación sostenible: lee las etiquetas y consume productos saludables, autóctonos y de temporada. Acércate a los productos ecológicos y de comercio justo.
- Exige información: rechaza aquellos productos que no te facilitan la información que necesites para elegir de forma responsable.
- Educación ambiental: es necesario inculcar a las generaciones futuras la necesidad de preservar el entorno natural.
- Cambia el modelo de consumo: menos es más
El consumo responsable es el que no daña el medio ambiente ni la sociedad. Es el consumo crítico, consciente y sostenible, que responde a las necesidades básicas y proporciona una mejor calidad de vida, y además es respetuoso con los derechos de los trabajadores.
Y un producto responsable es el que minimiza el uso de recursos naturales, materiales tóxicos y emisiones de desperdicios y contaminantes sobre el ciclo de vida del producto, de tal manera que no se ponen en riesgo las necesidades de futuras generaciones.
Para consumir de forma responsable deberíamos cuestionarnos si
¿Lo necesitamos realmente?
¿Cuánto me va a durar?
¿Podría pedirlo prestado a un vecino o amigo?
¿Qué han utilizado para el empaquetado?
¿De qué materia prima está hecho?
¿Es fácil de reparar?
¿Cuál es el país de origen?
¿Lo puedo conseguir en mi barrio?
¿Lleva algún tipo de certificado de producción ecológica o social?