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De cómo vivir sin dinero o con muy poco

La fábrica de jabón

Si hace dos días contaba una de las recetas que hay para hacer jabón casero, he encontrado una máquina, un pequeño electrodoméstico, más pequeño que un microondas, que transforma el aceite usado en jabón. Su nombre, La fábrica de jabón.

Ideado por la diseñadora industrial Analía Blanco, es según su autora, práctico y fácil de usar. «Una vez que acabamos de cocinar vertemos el aceite usado en el recolector-medidor de aceite a la vez que lo colamos para quitar los restos de comida. Este recipiente cuenta con un filtro incorporado que nos facilita esta tarea».

La fábrica de jabón, de Analía Blanco

La fábrica de jabón, de Analía Blanco

Solo hay que depositar en su interior medio litro de aceite, medio litro de agua y 80 gramos de sosa cáustica. Transcurridos 20 minutos se habrán creado dentro de los moldes del aparato las pastillas de jabón, que se solidificarán por completo al cabo de 48 horas. Luego se desmoldan y se parten los jabones sin necesidad de cuchillas.

Si se ralla, vale para la lavadora o para disolver en el cubo de fregar. Para una colada hacen falta 80 gramos de jabón industrial mientras que con jabón reciclado solo son necesarios 20 gramos, señala Analía Blanco. «Lavar la ropa es así 26 veces más barato, teniendo en cuenta que cada dosis de detergente ronda los 0,21 euros frente a los 0,008 euros del jabón reciclado”.

Con esta máquina, dice la diseñadora, se evita la contaminación del agua, consecuencia del vertido de aceites en el fregadero, y soluciona el problema del continuo almacenaje de estos residuos para luego tener que llevarlos al contenedor de basura o al punto limpio. Basado en la industrialización del proceso artesanal tradicional de fabricar jabón casero de toda la vida, aprovecha el calor emitido en la reacción química permitiendo de este modo reciclar el aceite sin tener que consumir otro recurso más como la electricidad para generar calor.
Su idea es sacarlo a la venta este año y está buscando la financiación necesaria para ello.

 

8 comentarios

  1. Dice ser Madrileña

    Desde luego, con este electrodoméstico no se lía el guarreo q se monta con el barreño el palo y demás utensilios necesarios,esperemos,q encuentre la financiación y su negocio suba como la espuma.

    20 enero 2014 | 07:38

  2. Dice ser The Fakinfab

    Y cuanto vale el aparatito? Quiza es más caro el collar que el perro…

    20 enero 2014 | 07:49

  3. Dice ser Hasta el Gorro

    Dadas las veces que he hecho jabón (más por aburrimiento y experimentar que por otra cosa), y tras escuchar a los mayores de mi familia cómo y cuándo hacían el jabón, quiero hacer un análisis de las limitaciones que le veo a este dispositivo en base a mi experiencia.

    Fundamentalmente, me ha llamado mucho la atención esta frase del texto:

    «Solo hay que depositar en su interior medio litro de aceite, medio litro de agua y 80 gramos de sosa cáustica»

    Tres problemas fundamentales:

    1) Si echas la misma cantidad de agua que de aceite, el resultado es un jabón tremendamente básico, con un índice de engrasamiento de cero, lo que reseca la piel y a la larga es malo de usar. Para ser útil, el índice de engrasamiento debería poder ser regulable, pues dos personas diferentes no encuentran agradable un mismo jabón con el mismo índice de engrasamiento.

    2) Si tienes que medir la cantidad de aceite a echar, la cantidad de agua, y la cantidad de sosa, lo único que te evita es lo que se ensucian los cacharros al hacer el jabón. Ni siquiera se endurece antes, pues el jabón tarda a endurecerse lo que dura el curado tras la saponificación.

    3) Dadas las proporciones que indica la noticia, se da por hecho que quien la compre va a emplear aceite de oliva. Hay muchos otros aceites y grasas que pueden ser empleados para fabricar jabón. Si la máquina no es capaz de detectar qué grasa está siendo empleada y ajustar las cantidades de agua y sosa a utilizar, carece de utilidad práctica.

    Tambien dice que es muy cómodo porque no hay que cortarlo… pues si esa es su principal ventaja, vaya gilipo***. Con engrasar moldes más pequeños y vertiendo el jabón recién preparado (antes de que cure) en ellos, se obtiene el mismo resultado.

    Es decir, a mi juicio es un sacacuartos que no hace nada que no se pueda hacer a mano. No estamos hablando de pintar la capilla sixtina, sino de una cosa que hacían nuestros abuelos para aprovechar sus recursos al máximo y que es más bien sencillo de realizar.

    En conclusión, más bien se trata de un dispositivo destinado a aprovechar la vagancia de la gente, la poca gana de sentarse a indagar un poco y averiguar como se hace a mano, que a fin de cuentas, tampoco cuesta tanto.

    Saludos.

    20 enero 2014 | 09:23

  4. Dice ser muy buena idea

    es una idea buenísima. Muchas felicidades a la gente que apuesta por este tipo de inventos que ayudan tanto.

    20 enero 2014 | 09:30

  5. Dice ser Hasta el Gorro

    Y otra cosa que me he dejado antes….

    Revisando la receta que da para la «fábrica del jabón», hay que pararse en un detalle… la reacción de saponificación no se mide por volumen, sino por gramos. Veamos los números:

    – 500 mL de aceite x 0.918 g/mL = 459 g de aceite (asumimos de oliva)
    – 80 g de sosa caustica / 459 g de aceite = 0.1743 (índice de saponificación)

    Los errores (además de bulto) son dos:

    1) ¿Más agua que aceite? Esto solo valdría si pretendes hacer gel, en cuyo caso hay que echar como 2 – 3 veces más agua que aceite (no 41 g más solo)

    2) El índice de saponificación del aceite de oliva es 0,134. La cantidad de sosa que pone en la receta es, simplemente, perniciosa para la salud de la piel (el pH de la piel es ligeramente ácido, mientras que el resultado de esto sería bastante básico)

    3) Para que el jabón resultante sea bueno para la piel, debe contener parte de grasa sin convertir en jabón, del orden del 3 – 5% del aceite, dependiendo del gusto del usuario. Según dicha receta… TODO el aceite se convierte en jabón…

    Lo dicho antes, un sacacuartos.

    20 enero 2014 | 09:43

  6. Dice ser lupe

    Yo lo he intentado hacer varias veces, siguiendo las instrucciones que vienen en el bote de sosa. Una vez dándole vueltas con un palo de madera y otra vez con la batidora. Solo se solidifica una parte, por arriba me sale líquido. Algo hago mal, pero no se qué.

    20 enero 2014 | 10:33

  7. Dice ser Hasta el Gorro

    @Lupe

    Si te sale líquido por arriba es porque se te ha cortado. La reaccion es muy parecida a la mayonesa.

    Te pongo la receta del que yo hice la ultima vez, que salio perfecto (solo falta que salga transparente, pero te puedo decir como se hace tambien).

    Vamos a ver, digamos que quieres hacer jabón de pastilla duro, con un índice de engrasamiento del 5% (95% del aceite se convierte en jabón), con aceite de oliva, y que salga lo mas transparente que se pueda. Pongamos que usas 1/2 L de aceite como en la receta de arriba.

    1) Primero mide las cantidades de material:

    – Cuela el aceite para eliminar impurezas. Cantidad de aceite es 500 mL x 0.918 g/mL = 459 g de aceite.

    – El jabón duro tiene 1/3 de la cantidad de aceite en agua. O sea, 459 / 3 = 153 mL de agua (porque la densidad del agua es 1 g/mL)

    – Calcula la cantidad de sosa: para un índice de engrasameiento del 5% tienes:

    Sosa = 0.95 x 0.136 x 459 = 59.30 g

    ¿Que te gusta más engrasado? Cambia el 0.95 por 0.93 o asi. ¡Pero no pongas menos de 0.90 que te saldra jabón flotando en el aceite!

    2) Ajusta las cantidades de material para hacerlas manejables (460 g de aceite // 155 mL de agua // 59 g de sosa)

    3) Diluye la sosa en el agua. Cuidado con los vapores. Usa un contenedor de plástico y un palo de madera. Remueve hasta que la sosa desaparezca.

    4) Comienza a verter el aceite como si hicieses mayonesa. Un hilillo de aceite cae dentro del agua con la sosa sin dejar de remover. (No remuevas muy rápido; el jabón cuaja en aproximadamente 15 – 20 minutos, con lo que corres el riesgo de cansarte).

    Una vez tengas todo el aceite en la mezcla, todo consiste en remover, y remover, y remover, durante más de 15 minutos, por lo general. A partir de los 12, yo lo que hago es parar de remover (se nota un cambio de textura a los 8-10 minutos) y soltar la cuchara de madera. Si la cuchara se queda trabada y no se mueve del sitio, el jabón está hecho. Si no, seguir removiendo y repetir este pequeño experimento cada dos minutos aprox.

    5) Una vez se traba la cuchara, verter la mezcla en unos moldes previamente engrasados, y dejar curar un minimo de 48 h. Pasado el tiempo de curado, desmoldar y… voilà.

    Si lo quieres hacer transparente, o lo menos turbio posible, una cosa que puedes hacer es el procedimiento caliente. Es exactamente igual, solo que el paso 4 lo haces al baño maría. En este caso, al aplicar calor, la grasa se distribuye con más facilidad, por lo que la reacción también es más rápida.

    Espero te sea útil.

    Saludos!

    20 enero 2014 | 17:57

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