La televisión ha creado un mundo esquizofrénico en el que entre el individuo y lo global no hay nada. Alain Touraine

Archivo de mayo, 2009

‘Sálvame’ en TELECINCO, ¿hay o no hay Tomate?

Buenos días desde Barcelona. Desde el centro de Barcelona. Desde mi primer piso con balcón a la calle en el centro de Barcelona. No os digo más. ¡Menuda nochecita! ¡Qué simpáticas las hordas juveniles alcoholizadas a gritos! ¡Qué emocionante es la épica del fútbol! ¡La madre que los parió a todos!

Ya. Me desahogué. Ahora vamos a lo nuestro.

Empezaré por una autorreferencia:

SÁLVAME DIARIO / TELECINCO

J. J. Vázquez regresa a la tomatina siestera

Jorge Javier vuelve a hacer gazpachos en las sobremesas de Telecinco, aunque en esta ocasión no se desperdicia nada; los tomates no se lanzan, sino que se recogen del huerto de los ‘realities’ de la cadena –Supervivientes y OT– para aliñarlos con el vinagre de viejos colaboradores de ‘A tu lado’ y el repetitivo aliento a ajo de su presentador. Y eso que lo mejor estaba por venir…

CONTRAPORTADA DIARIO PÚBLICO 27.04.2009

Para seguir con el extracto de una espléndida crítica de mi admiradísimo Víctor Amela en La Vanguardia hace un par de días:

Los protagonistas no son ya tanto triunfitos, grandeshermanos y supervivientes,sino los propios tertulianos fichados – se suponía-para glosar las peripecias de esos concursantes de reality. Pero el buen reality acaba sustanciándose en el propio plató: JJ chincha a sus tertulianos con sus mañas de mariquita mala, azuza a unos contra otros, fomenta piques y discusiones, alienta ofensas que luego restañará en un pasillo, agita duelos de mercadillo, orquesta un gran guiñol con los muñecos que tiene, que se lo ponen fácil: Belén Esteban, Karmele Marchante, Jimmy Jiménez-Arnau (temible pirotécnico de imágenes verbales) y Kiko Hernández, los especímenes más deslenguados que hoy sea dado reunir en un plató. Las rencillas entre ellos, despellejándose con afilada lengua a propósito de cualquier banalidad – ¿han consumado o no Lecquio y Miriam?-son una juerga para el telespectador desocupado, que no acaba de saber dónde acaba el guión y empieza el rencor, expectante por ver hasta dónde salpicará la sangre y la saliva.

Amela da por muerto el Tomate. Yo, en mi modesta opinión, lo doy por aliñado a bajo precio. Sea como sea, es impresionante que haya tenido que volver JJ Vázquez -de la mano de Belén Esteban– a resucitar las sobremesas de Telecinco. Y a fe que lo están haciendo; el programa funciona de vicio. De vicio inconfesable, sí, lo mismo que el viejo Tomate…




Más Callejeros y menos viajeros

La adaptación de Cuatro de ‘Españoles -y quien dice españoles dice madrileños, castellanomanchegos, andaluces…- por el mundo’ empezó mal, pero no mal del todo. Empezó con el retrato de algunos compatriotas nuestros en parajes exóticos que hablaban de cuánto echaban de menos el jamón, la tortilla española, de lo barato que estaba el servicio aborigen, o sobre «lo feas que eran las tías de día y lo buenas que estaban de noche» (un contraste que no tiene nada que ver con los milagros de la cosmética, ni el disfraz, sino con la pura lucha de clases: el día es para las clases bajas, que duermen de noche mientras las clases altas lucen el spa y las compras a los que dedicaron su jornada. Cuanto más pobre es un país, mayor diferencia existe entre la fauna de sus noches y de sus días…)

Hasta que llegaron a Las Vegas y descubrieron que lo que de verdad le molaba a la gente era ver ‘Callejeros viajeros… pajilleros’.

Ahí comenzó una nueva etapa del programa -que incluye el de Las Vegas, el de Filipinas de la semana anterior y el de Tokio del domingo pasado-, donde los clásicos pastilleros del Callejeros clásico han sido sustituidos por putas, chaperos, madamas y clientes.

¡Otra vez lo de siempre! Sí. Pero lo de siempre, funciona. El sexo -menuda novedad- vende. Se vende. Y ‘Callejeros viajeros’ ha encontrado el filón de un nuevo formato: el ‘Reporturismo sexual’.

Otra propuesta: ‘Walker Texas Ranger: el debate’

Llevo una semana en Madrid por razones profesionales que no vienen al caso -como mucho, al Caso Gürtel; me han contratado en la Comunidad como modista de cabecera de Esperanza Aguirre. «Todo en negro», me dijeron. Y pensé que Espe se había decidido por el LL (look luto), después me explicaron que se referían a los pagos. Me pareció fenomenal, aunque me he negado a usar bigudíes en el bigote, por supuesto-, una semana en plan loba capitalina durante la que he descubierto la maravilla de Curri Valenzuela en vivo y en directo justo a continuación de esa gran serie de Chuck Norris que tantos nódulos provocó en la privilegiada garganta de Carmen Sevilla, Walker Texas Ranger.

Para los que no hayáis visto nunca el gran programa de Curri en Telemadrid, ALTO Y CLARO, que sepáis que es una tertulia fabulosa donde, por fin, uno descubre cosas reveladoras, como que ZP es un radical de izquierdas, el PSOE un partido stalinista, y servidora una bolchevique de tomo y lomo a sueldo de Hugo Chávez. Todo un consuelo para aquellos que creíamos que la izquierda española dormía el sueño de los justos.

Una vez puestos en antecendentes, trataré de ir directamente al meollo de este post: una nueva propuesta televisiva (gratis total) que puede conseguir que TELEMADRID deje de ser ese canal minoritario y alcance el éxito de crítica y público de otras cadenas tan respetables como TELECINCO.

¿Cómo así?

Muy sencillo. Basta con recurrir a un vocablo de los 90 del pasado siglo: sinergia. Exactamente lo mismo que hace la Cadena-amiga-de-lo-mejor-que-está-por-llegar-aunque-mientras-esperamos-ponemos-a-Jorge-Javier-para-que-vaya-haciendo-tiempo. Copiar el formato de las tertulias sobre realities de Tele5 y convertir ALTO Y CLARO con Curri y sus secuaces en TACHÁAAAAAAAAAN: WALKER TEXAS RANGER, EL DEBATE.

¡Qué maravilla! Un programa diario donde Curri y sus secuaces analicen cada capítulo de esa gran serie de Chuck Norris, establezcan paralelismos con España, amenazada por destructores de la familia, peligrosos izquierdistas e infanticidas a tiempo completo. La hostia. Curri y Chuck mano a mano, a mandoble limpio. Un delirio televisivo.

(De verdad te lo digo Esperanza, que esto arrasa, en serio.

Y baja un poco el brazo, que si te tomo mal la medida después te tira la sisa, mari)

f U

So you say it’s not okay to be gay.

Well I think you’re just evil.

You’re just some racist who can’t tie my laces.

Your point of view is medieval.

Fuck you. Fuck you very, very much.

‘Cause we hate what you do

and we hate your whole crew,

so please don’t stay in touch.

LILY ALLEN

(Una delicia -donde haría coros encantado- descubierta gracias al DIVARIO DE MISS SHANGAY LILY)

Eurovisión: una propuesta

El sábado vimos el festival entero en vivo y en directo. Aguantamos despiertos la canción de Noruega e incluso soportamos la visión del tinte de Lloyd Webber. Nos gustó que Soraya se hubiera puesto unas bragas con flecos y nos pareció fatal que no ganara Ucrania, que fue el único número eurovisivo que no nos decepcionó: singin’ puton verbenero, cuerpo de baile de chulazos centuriones siglo XXI y mucho glitter. Una penita.

De las votaciones, poco que decir que no haya dicho ya Uribarri o Massiel, esos otros dos expertos en Eurovisión.

::::::::::::::::: (Conste que este recorte es de hace un par de años) :::::::::::::::::

Sobre lo que sí tengo una opinión, e incluso una propuesta, es sobre los cambios que deberían hacerse en el concurso. Nada que ver con el «¡pues no vamos más, ea!» que se escucha últimamente. No, no, no. Lo mío va más allá, es mucho más radical y mucho más internacionalista.

He aquí mi propuesta:

1. Que Eurovisión se celebre al tiempo que un nuevo festival de la canción africano: Afrivisión

2. Que el país que quede el último en las puntuaciones de Eurovisión sea condenado a cambiarse por el país ganador de Afrivisión, que se llevaría como premio la colonización del país europeo que pasaría a ocupar su territorio.

Ya verías tú cómo nos íbamos a empezar a tomar Eurovisión en serio…

«Desmontando a Paquirrín»: por qué sí

Anoche, mientras veía el programa de Monegal -que cada día me interesa menos porque cada día demuestra enterarse de menos cosas- decidí escribir este post. Justo después de que el pope Monegal -que no se entera, insisto- resumiera DESMONTANDO A PAQUIRRÍN de la misma manera que lo han malentendido tantos ágrafos que exhiben su analfabetismo en foros y blogs: como una rendición de SLQH a la figura del friki famoso que ellos tanto criticaron.

Y no es eso. En absoluto es eso. DESMONTANDO A PAQUIRRÍN es la lógica continuación del trabajo de deconstrucción de las mentiras del chisme televisivo que SLQH lleva haciendo algunos años.

DESMONTANDO A PAQUIRRÍN es una excelente forma de mostrar cómo funcionan los mecanismos del humor, cómo puede crearse un personaje -que no considero que tenga nada de freak– a partir de los prejuicios ajenos y la experiencia cercana, cómo combinar la ficción colectiva con la propia percepción y sacar de ello una pieza cómica.

Lo que hacen Angel Martín y Dani Mateo con Paquirrín es escritura. Es construcción de un personaje a partir de la experiencia, es elaboración de un personaje cómico televisivo a través de su propia vida y de la vida que creen los espectadores que tiene. Y tendrá que ser a partir de esta premisa como nos toque juzgar el éxito o el fracaso del proyecto.

A mí, de momento, me interesa mucho y me divierte, porque me encanta descubrir las tripas expuestas del trabajo que dos buenos guionistas hacen con los elementos que tienen a su disposición. Y creo que está muy bien aprovechado como material televisivo.

Así es como lo entiendo yo. Y me gusta.

PELOTAS

Anoche vimos el último capítulo de la primera temporada de PELOTAS. Por suerte sabemos que habrá más, que no hemos terminado para siempre con esta fantástica galería de personajes complejos en conflicto, con este grupo de gente adorable y simple solo en apariencia que nos tiene conquistados y ha conseguido incluso que entendamos la épica del fútbol de una vez por todas gracias a un equipo humilde.

PELOTAS es una de esas series que me despertó unas expectativas enormes y las ha cumplido todas. Gracias a su tono agridulce, perfectamente ajustado, a sus fabulosos actores, a los guiños preciosos de un guión espléndido y a la enorme piedad que demuestra por cada uno de los habitantes de ese espacio de ficción o no tanta.

Anoche lloramos, por supuesto. Como tiene que ser. Igual que lloré la semana pasada en un avión al terminar de leer EL BALONAZO, el último libro de Belén Gopegui, un precioso cuento para niños donde, igual que en PELOTAS, el fútbol es mucho más que un juego, un deporte o una afición.

(A todo esto, sospecho que si el domingo el Barça hubiera ganado la liga y hubiese tenido que soportar la euforia de las hordas en el centro de Barcelona, hoy no habría podido escribir este post. Es que a mí la épica futbolera me interesa mucho más en la ficción inodora, me temo).

El Bulli TV

Qué bueno el documental en dos partes sobre El Bulli que emitió La2 anoche y anteanoche. Y qué bueno ver a mi amigo El Pingüe entre los testimonios después de haber leído ayer su espléndido post sobre la primera parte.

Qué gustazo asistir a tanta verdad en televisión, tanta pasión auténtica tan bien contada. Qué delicia.

Lejos de prejuicios, de ínfulas y pretensiones, el ‘Resumen del catálogo de El Bulli’ es sobre todo VERDAD. Lo vuelve a escribir hoy mi admirado Pingüe en su blog. Probablemente por eso nos gusta tanto, porque además consigue transmitir toda esa autenticidad a un medio tan falaz como la televisión. Emociona y traspasa.

Si no lo vistéis, podéis hacerlo en la web de RTVE. Hacedme caso, por favor.

Creo que es uno de los momentos televisivos más felices que he vivido en los últimos años y, tal vez, el mejor retrato sobre la proceso creativo que ha emitido la televisión.

Superegos en serie

Que no cunda el pánico; no pienso volver a hablar de LA TRIBU sino de algo bueno. Del estreno mundial del primer episodio de SUPEREGOS, una nueva serie online con una pinta estupenda, un inteligente punto de partida (súper héroes y súper villanos visitan al psiquiatra), guiones llenos de referentes y guiños cómplices. Me gusta, y estoy seguro de que me irá gustando más en sucesivas entregas. Disfrutad del primer episodio y NO OS PERDÁIS el estupendo post que acompaña la sesión del Soldado Imperial.