En los años 50, cuando Capote estaba escribiendo Desayuno en Tiffanys, conoció en Tánger a dos personajes excepcionales, íntimos amigos de Paul Bowles, y con quienes compartió juergas y fantasías moriscas:
Emilio Sanz de Soto (creador de la revista literaria Zero , publicación precursora del movimiento Beat en la que colaboraron Ginsberg, Kerouac y William Burrougs en sus tiempos africanos. Sanz de Soto, director artístico de algunas de las películas de Saura, historiador de cine, amigo de Buñuel y todo un personaje, que aparece en un espléndido documental de Rioyo y Lopez Linares titulado, «Tánger, esa vieja dama«, en el que también podréis descubrir a
Pepe Carleton, pintor, decorador y esteta que fue propietario de uno de los bares míticos de la época dorada de Marbella (en los años de Cocteau y compañía); el Cero, donde iban a emborracharse Conchita Montes y Edgar Neville, entre otros.
[INCISO: qué pena haber pasado del Zero y del Cero, a la Zero. Qué catástrofe para el mariconismo ilustrado español…]
En los años 60, Haro Tecqlen se integró en aquel grupo tangerino de Sanz de Soto, Carleton, Bowles…
Hace dieciseis años, cuando yo trabajaba como jefe de prensa de una compañía de teatro que estrenó en Madrid «Pervertimento y otros gestos para nada» de José Sanchís Sinisterra, vino a vernos Eduardo Haro Tecqlen. Iba a acompañado de su mujer, Concha, y de Mauro Armiño (que es el autor de la mejor traducción de «En busca del tiempo perdido» de Proust al español. Con perdón de Salinas y sin el perdón de Manzano).
Esa noche cenamos con Mauro Armiño, con Haro Tecqlen (un detalle: ambos vestían una gabardina idéntica) y con Concha Barral (que entonces trabajaba en RTVE y nos contó, muy divertida, los absurdos planes de ahorro del «ente público»).
Ah,… la crítica que nos hizo Haro para El País fue buena.
(Yo era muy joven, y no supe que estaba cenando tan cerca de Capote…)
Grados: 3º
Truman Capote y yoTruman cuenta como odíaba «Clavelitos» porque la tarareaba el cabrón de su padre mientras se afeitaba. Más tarde, en Tanger, escuchó la versión de mi tía abuela, la soprano Conchita Supervía, y le encantó. Fue un momento supremo porque hay modos y modos de reconciliarse con el pasado sin pervertir el presente y ese fue uno. Mi tía abuela hoy está muy olvidada, salvo por los muy, pero que muy melómanos.P.D.- Sigo sin poder comunicar desde tu blog.
30 noviembre -0001 | 0:00
Bueno chicos, me marcho, os dejo tranquilos, quería picarte un poquito Bob, pero como esto es la monda en vez de entrarme al trapo tu (sin tilde), me a entrado el otro, ya veo que eres inteligente, un beso cariño.Y tu Vanbrugh, cásate conmigo, y te prometo que pondré bien las comas y los acentos, y beberé cerveza de la que entra en el organismo procedente de una jarra de barro – boca en forma de «ja» alemán, mirada al frente, y cuello relajado. jajajaja
30 noviembre -0001 | 0:00
hace 16 años??? mira que yo no te veia tan mayor….creia que eras mas jovencito y tal por la foto…o te conserva requetebien o la foto es de hace años ;)mi unica relacion con Capote son sus libros.sobre todo uno que lei por pura casualidad…despues de leerme el libro de: El Psicopata (yo vivi con uno de verdad) habia una referencia a un libro de capote : a sangre fria, que precisamente es la historia de un asesinato casual perpetrado por dos psicopatas….me gusto mucho…te lo recomiendo..es cuanto menos, curiosa la historiasaludos
08 agosto 2006 | 13:47
Ja ja! Increíble, Bob, te diré (modestia aparte) que tengo grado uno con un pisapapeles de Colette.Pero con Capote, dulce, has dignificado este juego. Felicitaciones.
08 agosto 2006 | 17:16
16 años atrás, y dices que tienes 34, con 18 jefe de prensa de una compañía de teatro y etc etc. Tus blogs no tienen desperdicio, porque están llenos de imaginación, Bob, o tu no tienes 34 años, o tienes mucha imaginación, o eres muy fantasma.
09 agosto 2006 | 6:52
o he hecho muchas cosas desde muy pequeño, querida…
09 agosto 2006 | 7:34
Dudo mucho que hicieras muchas cosas desde muy pequeño, excepto tirarle piedras a los gatos y darle patadas a las latas por la calle, porque si con 18 años eras jefe de prensa de una compañía de teatro, y con 34 años solo escribes en un blog, poco has progresado querido…Te sugiero que saques otro tema más interesante para tu blog, porque con lo de los grados estas triunfando muy poco.
09 agosto 2006 | 10:17
Bob, Ava Lavinia tiene razón, no has triunfado nada. Triunfar debe ser pasearse por blogs ajenos escribiendo comentarios venenosos con todas las comas mal puestas y sobrenombres sonoros. ¿No te da envidia?
09 agosto 2006 | 10:32
Te equivocas Vanbrugh, triunfar es pasearse por blogs ajenos hacerle la pelotilla a Bob y escribir en nombre de otro, y poner todas las comas en su sitio y sobrenombres insonoros.Ya veo que tu si has triunfado, porque lo que tu haces no lo hace todo el mundo.
10 agosto 2006 | 3:34
Lavinia, hija: la coma que has puesto después de «en nombre de otro», quítala de ahí, donde no hace falta, y ponla detrás de «te equivocas» y antes de «Vanbrugh», donde sí. Pon otra después de «blogs ajenos».»Tú» lleva acento, y «sí», también.Ya ves que no es tan difícil. Estoy seguro de que una chica tan lista como tú logrará dominarlo con solo un poco de práctica.A cambio de esta modesta lección, si algún día llego a tener algún interés en eso que llamas triunfar ya te pediré que me cuentes cómo lo haces. Seguro que es apasionante.Mientras tanto déjanos un rato tranquilos, anda, guapa. Vete a triunfar otro poco por algún otro sitio.
10 agosto 2006 | 8:33
Vanbrugh, que superintilistuaaa eres hijo: yo también te quiero, pero te repito lo mismo, “si” (sin tilde) triunfar es hacerle la pelotilla a Bop, escribir en nombre de otro y pasearte por blogs ajenos, y decir que a “tu” (sin tilde) mujer le gusta la cerveza en tubo, entonces tu (sin tilde) ya has triunfado.Vanbrugh, coma y beba, y no te enfades que te pones muy feo, y si alguien tiene que dejar tranquilo a alguien, es usted a mi, porque yo me dirigí a Bob no a ti, tiriri.
10 agosto 2006 | 9:20
De risa, pone comas y puntos por todas partes menos donde debería ponerlas, y se queja de que otros pongan las comas mal puestas.
17 agosto 2006 | 3:47