«Meet-an-inmate, ayudando a los presos desde 1998″. Con este caluroso eslogan se presenta una web que moderniza eso de escribir cartas a las personas que están en la cárcel. Ya sabéis, esa forma de correspondencia que aquí no se lleva mucho pero en Estados Unidos tiene su público (… y así fue como la tía Selma se casó con el actor secundario Bob en Los Simpsons).

Era cuestión de tiempo que, si esta organización lleva más de una década en marcha, terminara por causar furor. Ya sabéis, un montón de fotos de presos y presas donde revelan sus aficiones, dispuestos y dispuestas a recibir cartas de gente que les ayude a sobrellevar la soledad. Pues ale, ese momento ha llegado, y ha llegado de la mano de una lista que recoge las presas más atractivas con las que puedes cartearte. Tiene su coña, máxime si tenemos en cuenta que la lista incluye algunos datos que obvia la web y que pueden resultar de interés: la razón por la que están encarceladas esas personitas.

Así es como la lista, la web y los presos que figuran en ella han llegado a los medios de todo el mundo. Por si tenéis interés, os diré que en cada ficha de presidiario podéis encontrar la fecha de nacimiento, la fecha en la que está previsto que quede en libertad, la altura, la religión, si fuma o no fuma, si quiere recibir cartas de personas de ambos sexos, cuánto ha estudiado, a qué se dedicaba antes de entrar en la cárcel y a qué dedica el tiempo entre rejas.

¿Que te convence la persona sobre la que has estado indagando? Pues apunta su identificador y el estado en el que se encuentra tu preso o presa y busca los antecedentes en la web Free Inmate Locator, por lo que pueda pasar. Yo he hecho un par de búsquedas y he encontrado que la chica número dos de la lista está en prisión por asesinato, que hay algunos hombres que buscan pareja y están acusados de agresión sexual y violación… yo no quiero juzgar el pasado de nadie, pero me parece que los hay que están forzando la maquinaria.

Yo aviso porque en la web hay un apartado en el que te dicen que no quieren saber nada de los posibles problemas derivados de un dato incorrecto, de un perfil que no se ajusta a la realidad, etc. Además, el propio inventor del chisme, Arlen Bischke, no recomienda que se use la web para establecer una relación seria: «Las probabilidades de que todo funcione son escasas porque hay muchos obstáculos», admite en la sección de «preguntas frecuentes».

En cualquier caso, como yo no quiero ser agorero, os doy dos visiones que existen dentro de la propia web, y vosotros os quedáis con lo que más os guste:

– Que estas personas estén en prisión no significa que sean malas. La mayoría de ellos son divertidos, cariñosos y apasionados.

– No olvides que están en la cárcel por una buena razón. Esto es conoce a un preso, no a un boy/girl scout.

PD: Yo tampoco quiero responsabilidades si escribís a alguno y la boda no sale como esperabais, ¿eh?