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De la Morena y su desafortunada gracieta

BecConsejo: «Teme el ridículo»

José Ramón de la Morena es un tipo bastante particular. Lo pasó mal en sus inicios en la SER y por meterse con José María García, que entonces era casi un dios (así estaban las cosas, por increíble que parezca), se vio en la calle temporalmente y con Paco González, el mismo que ahora está en la COPE, cubriéndole El Larguero.

Es tan particular que después de rajar de García lo habido y por haber, terminó admitiendo que ahora tiene sus mismos vicios. Es tan particular que por querer hablar como el pueblo llano, deja al pueblo llano como inculto. Es tan particular que su sentido del humor pasa por hacer una gracia sin gracia dejando en evidencia a Sara Carbonero.

Supongo que estáis al tanto, si no, os pongo en antecedentes. Gala de los 40, De la Morena (reputado periodista) y Sara Carbonero (¿primeros pasos de la fusión Prisa-Telecinco?) entregaban un premio. Lee el texto José Ramón (primer error) y grita: «El ganador es… ¡¡¡IKER CASILLAS!!!».

No, evidentemente no había ganado Iker. Ganó Shakira, pero eso a Sara, casi, casi, podíamos decir que ya le daba igual. Puso cara de «por qué me tiene que pasar a mí esto» y trató de no mandarlo a la m… perder la compostura. ¿Cómo? Mirando hacia arriba y susurrando unas palabras que, por más que veo el vídeo, no soy capaz de descifrar. Si alguno de vosotros lo averigua, que me lo diga por favor.

Los números no le han ido bien a De la Morena, que ha visto cómo su vilipendiado Alcalá (junto a Larrañaga) le resta oyentes y cómo con González se ha marchado casi toda la tropa de la SER, que no dudó cuando se vio obligada a elegir. Sin embargo, esta desafortunada gracieta no se debe a eso.

El chiste fácil se debe a que él considera que la gente ríe con esas ocurrencias y que la audiencia está encantadísima con sus sermones. De ahí que haga el chascarrillo y se quede tan ancho, mientras Sara no sabe dónde meterse. No sé, a mí me parece una broma de mal gusto.

¿Era necesario hacerle pasar ese mal trago a la chiquilla? ¿No tiene bastante con que digan que es subdirectora de deportes (algo que nunca ocurrió) en Telecinco, con que especulen sobre si se opera o no se opera, sobre si Iker juega mejor o peor sin ella? Pues parece que no. Lo del otro día fue como quien deja en ridículo a un amigo delante de desconocidos, por el simple hecho de que con él tiene confianza. No mola… ni un pelo.

En fin, que tampoco nos vamos a hacer más mala sangre. Esto es un blog de (algunos días más y otros menos) humor y (a ratitos) televisión, así que mañana nos volvemos a reír, ¿vale? ¡¡¡Que ya es casi viernes!!!

PD: ¿Es la táctica de Joserra para recuperar a la audiencia joven? Anonadado me hallo.

La pareja del año necesita un mote

BecConsejo: «Ten fuerza»

Seamos sinceros, las cosas molan más con mote. Messi está bien, pero es más gracioso La pulga. Higuaín es fallón simpático, pero Pipita es mucho mejor. Juan Carlos Navarro es bonito, pero no sería nada sin La Bomba… conclusión, si quieres que mole, ponle un mote. Por eso a mí me llaman Bec en vez de… bueno, eso. Que me llaman Bec.

Así que mi otrora socio David, me chivó que en su redacción ya hablaban de ello respecto a la pareja del año (Iker Casillas y Sara Carbonero). Y es que claro, comparado con Brad Pitt y Angelina Jolie, nos estamos quedando atrás. Ellos son Brangelina y nosotros… ¿qué tenemos nosotros? Ná de ná, un Iker y Sara que se nos hace larguísimo, no tiene gancho, no hace gracia… necesitamos un mote.

Llegado este punto hago un inciso, para deciros que lo de mote no lo digo en tono despectivo ni peyorativo, sino todo lo contrario. Es más, yo que soy aficionado a leer el diccionario, como Iniesta en Crackovia, os puedo dar la definición exacta. Mirad:

Vaya… parece que he abierto por la página equivocada… bueno, no hay mal que por bien no venga. Ahora ya sabéis que además de humorista, mota es un granillo que se forma en el paño. A lo que vamos… «mote».

Ahora sí. Ya os advierto de que la acepción no es tampoco 100% exacta para lo que vamos a hacer, pero oye… el mundo perfecto no existe. Y sin más dilación, redoble de tambores… vamos a por el mote… ¡¡Ah, no!! ¡¡Mejor!! ¡Elijamos dos! Allá van:

1. ‘Carbonillas’: Es bueno para definirlos porque es inusual, aúna a las dos personas (es en plural) y es más castizo que el pijo Brangelina. No sé, no sé… me gusta.

2. ‘Casillero’: Hombre, también tiene su encanto, para qué mentir. Partimos de la idea de que ya no son una pareja, sino que son un ente único, dual… el problema es que, pensándolo fríamente, es más cutre. Bueno, más cutre no, es cutre que te cagas inadecuado. Un casillero… bah, eso no tiene encanto ninguno.

Ahí tenéis mis dos propuestas (gracias al crack de David), para que las sopeséis. Aún así, me gustaría que fuérais vosotros quienes proponen motes que los superen (todos debidamente respetuosos, que si no saco la tijera y luego vienen los lloros y los lamentos).

En cualquier caso, os quiero dejar claras un par de cosas, desde la amistad. Primero, que olé por ellos, que son jóvenes, guapos, con éxito y por unos momentos me dieron la esperanza de ligarme a Eva González. Y segundo… si tenéis pensado comercializar pins con imágenes de la pareja y el mote, lo siento… yo estaba primero.

PD: Sí, sé que el post de hoy es raro, raro, raro… pero todo tiene una explicación. No, no es que el calor me esté afectando, es que… (ver a partir del 1:15)