Hay cosas que envidio de los estadounidenses, al igual que me pasa con los japoneses. Una de ellas es que las estrellas yanquis son mucho más cercanas que las nuestras.
Me explico, en Estados Unidos las cuentas de twitter de muchos famosos son conocidas por todo el mundo (Shaq, Ashton Kutcher, actores de Heroes como Brea Grant y Greg Grunberg…) mientras que en España se conocen sólo cuatro o cinco (Pilar Rubio es de las más accesibles) y existe un miedo enorme a los fans.
Por eso estoy orgullosísimo del día en el que me contestó David H. Lawrence, el titiritero de la serie Heroes.
Todos conocéis mi devoción por esta serie y, en especial, por Hiro Nakamura (1: lo sé, somos muchos en este barco, y 2: el de la camiseta de Hiro soy yo, efectivamente), por eso se me ocurrió dejar un mensaje para Ando y otro para los ya citados Matt Parkman, Daphne y… David H. Lawrence.
Este último me contestó al twitter del becario y me pidió que le escribiera a su correo personal comentándole por qué me había hecho follower suyo.
Yo lo hice y le expliqué lo que os contaba unas líneas antes de esto: que la serie me gustaba, que encontré sus cuentas de twitter y, que como buen becario que soy, comenté algunas cosas de las que ellos iban escribiendo, por aquello de crear comunidad.
El resto de actores pasó de mi cara, por supuesto, pero sólo con la respuesta de David ya me fui contento a casa… qué le vamos a hacer, soy de sonrisa fácil.
De todos modos, incido en lo que os comentaba al principio: ¿por qué este tipo de actores, con más fama que muchos de los nuestros, se molestan más en conocer a sus fans que los españoles?
(ACTUALIZACIÓN 10:05: Os añado un vídeo de su papel en Heroes, para los que no le conozcáis)
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Siguiendo con mi resumen del año 2008 por países y personajes que 
La estrella del pop nipón siempre ha sido objeto de controversia: que si se ha operado los ojos para parecer más occidental (tiene más pinta de rumor que de otra cosa), que si sus días como cantante están contados…
El nombre de 
Aya Ueto es una polifacética (cantante y actriz) que, sin embargo, ha pasado con más pena que gloria por Occidente. Salvo Azumi (I y II), el resto de sus películas no han sido especialmente famosas. Es más, sus series, como Attenttion please o Attack no.1 tampoco han reventado los medidores de audiencia.