Vlad Averbukh tiene 29 años, vive en Nueva York y se dedica a la creación de páginas webs. Aún así, es probable que no lo conozcas, porque Vlad no se ha hecho famoso por ninguna de las características anteriores, sino porque sigue la «dieta paleolítica».

Seguramente eso de la «dieta paleolítica» te sonará a chino, así que os invito a que conozcáis conmigo un poco más a Vlad y descubráis de qué se trata exactamente.

– ¿Qué es exactamente la «forma de vida paleolítica»?

La vida paleolítica consiste en emular algunos de los comportamientos que tenían nuestros ancestros durante el Paleolítico. No es cuestión de imitar todo lo que hicieron, sino que lo focalizamos en aspectos que aún pueden ser beneficiosos para nosotros. Entre los seguidores, hay varios grados de adhesión, por así decirlo. Algunos optan por sólo comer como nuestros ancestros, mientras otros también tratan de mantener la actividad que tuvieron ellos.

– ¿Qué diferencias hay entre un grado y otro?

Los hay que practican también el ayuno, saltándose alguna comida, ya que nuestros antepasados no siempre tuvieron acceso a ella y otros van más allá y tratan de dormir mucho y aprovechar las horas de sol, ya que en el Paleolítico pasaban gran parte del tiempo al aire libre y no tenían electricidad, algo que nos permite a nosotros estar despiertos hasta tarde.

Comiendo como lo hacían los primeros seres humanos, lo que hacemos es comer aquello que estamos genéticamente adaptados a ingerir. Aunque ha habido algunos cambios genéticos desde el advenimiento de la agricultura, la gran mayoría de nuestro ADN se forjó cuando vivíamos de forma salvaje, por tanto, nuestro cuerpo responde mejor a a los alimentos de esa época.

– ¿Todos coméis lo mismo?

No, también hay diferentes interpretaciones de lo que supone la dieta adecuada del paleolítico. Algunos comen mucha carne y otros optan por las verduras. Un denominador común es que nos limitamos a comidas que fueron introducidas en el Neolítico. La dieta paleolítica se basa, principalmente, en comer carne, marisco, frutas, verduras y algunos frutos secos. Todo lo procesado o artificial, se excluye. Algunos de los que seguimos esta dieta, como yo, comemos un alto porcentaje de la comida cruda, aunque debo apuntar que no es preciso optar por la comida cruda para lograr los beneficios que aporta a la salud esta dieta.

– ¿Cómo empezaste?

Siempre me ha fascinado la antropología, me encantaba aprender cosas de los primeros humanos y de las diferentes culturas. Hace unos años, me enteré de que muchas de las enfermedades modernas eran desconocidas en el Paleolítico. Desde entonces, he adaptado paulatinamente mi dieta a la de nuestros antepasados.

– En algunos artículos, la gente te describe como un hombre de las cavernas, pero no es exactamente así, ¿verdad?

Como la mayoría de gente puede no estar familiarizado con el término Paleolítico, usan «hombre de las cavernas», pero no me molesta. Se puede describir este modo de vida de muchas otras formas, los hay que lo llaman «primitivo» o «cazador recolector», por ejemplo.

– ¿Es barato?

Desde que prefiero conseguir yo mi comida, gasto más que otros. Desearía que todo el mundo hiciera lo que yo, porque no es sólo bueno para la salud, también lo es para el plantea. Una de las razones por las que los alimentos tradicionales son baratos es porque a menudo están subvencionados por el gobierno, algo desafortunado porque no son buenos con el medio ambiente. En invierno, gasto de 50 a 70 dólares al día (de 36 a 50 euros, aproximadamente) en comida. En verano, cuando cultivamos fruta fresca de temporada, gasto de 25 a 30 dólares (de 18 a 22 euros).

– ¿Cuánto ejercicio haces al día?

No suelo ir al gimnasio, pero siempre estoy activo, paseando por la ciudad y haciendo deporte. Además, dedico algunos minutos al día a hacer ejercicios de bodyweight, porque me gusta hacer movimientos que no requieren equipamiento especial y que pueden hacerse en casa o al aire libre.

– ¿Qué piensan tus amigos de este modo de vida?

Yo siempre estoy dispuesto a explicar mis ideas sobre este tema a los demás, porque creo que también sería beneficioso para ellos. Sin embargo, no he tenido mucho éxito en conseguir que otros se conviertan al Paleolítico. Hay algunos aspectos que no terminan de enganchar a la gente, como cuando les dices que hay que comer mucha carne. Esto es porque en América se cree que la carne es mala y consideran que ser vegetariano es más saludable. Dicho esto, he tenido amigos y novias en el pasado a los que les encantaba comer carne, e incluso comer carne cruda.

– ¿Qué sueles comer en un día?

No tengo un horario de comidas como la gente suele tener. Si no tengo hambre, no como. Casi nunca desayuno, por ejemplo, y mi mayor aporte calórico viene en la tarde noche. Mis mayores comidas serían después del entrenamiento o de algún tipo de ejercicio agotador, como practicar deporte. Los primeros humanos tenían que trabajar mucho para su siguiente comida, ya fuera cazándola o buscándola, así que creo que nuestra evolución nos permite absorber mejor las calorías después de estar físicamente activos. Me gusta la comida sabrosa, las bayas, la carne grasa… suelo comer fuera varias veces a la semana, y no siempre puedo ser tan estricto, ya que los restaurantes no suelen estar orientados a gente como yo.

– ¿Te gustaban las hamburguesas, la leche o los cereales?

Rara vez como algo procesado, como pan, cereales, o aceites vegetales, pero, dado que no muchos de mis amigos no comparten mi dieta, no puedo evitar comer comidas «no paleolíticas» cuando estoy en actos sociales o si alguien cocina para mí. De vez en cuando tomo leche si es orgánica, pero en realidad la añadimos a nuestra dieta después del Paleolítico. Los alimentos como las patatas, las legumbres y el maíz tampoco son paleolíticos, y se evitarían.

– Supongo que sólo bebes agua…

Sí, agua filtrada y a veces té de hierbas.

– ¿Has pensado alguna vez en escribir un libro?

Sinceramente, no tengo interés alguno en escribir un libro, pero a menudo doy consejos a la gente sobre el Paleolítico, así que creé un blog para que la gente tuviera más fácil acceder a esta información. Afortunadamente, en los últimos años ha habido un interés creciente en el Paleolítico y se ha producido una explosión de libros sobre el tema. No estoy completamente de acuerdo con los expertos, ya que yo tengo mi propia idea de qué constituye un modo de vida Paleolítico óptimo, pero creo que pueden ser muy útiles para los principantes en esto.

Los dos libros más populares sobre el tema son Primal Blueprint, de Mark Sisson, y Paleo Diet, de Loren Cordain, ambos excelentes libros para alguien que quiera aprender un poco más del tema.

PD: Bueno, ¿qué os parece el Paleo lifestyle? ¿Os animáis?

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