Me rebota Virginia un correo bajo el asunto ‘Premios a los constructores’ que ha hecho que me replantee mi futuro. Desde hoy tengo claro que quiero dedicarme a la construcción. Seguro que en el sector hacen falta becarios y, por lo que veo, equivocarse no es un problema. No veo motivos para no intentarlo. Es más, creo que estoy capacitado para hacer cosas muchísimo peores.

Tras este espectacular resumen de joyas arquitectónicas, en dicho mail se daba como ganadora a la siguiente imagen, aunque yo me quedo con cualquiera de los ejemplos de escaleras anteriores. ¿Cómo lo véis vosotros?

PD: La verdad es que orinar ahí tiene que ser la risa. O metes culo o te quedas fuera. Aquí, llegar primer (como en el cole) es una cuestión de supervivencia.

Envía el post: