Si hace unos meses, ya me pareció rocambolesco el traslado de cuatro vacas robadas en el maletero de un coche (tan cierto como que el cielo es azul si está despejado). Ahora me encuentro con una genio peruana del hurto, que para no ser descubierta, pintó la res que había sustraído como si fuera la protagonista de un anuncio de una famosa marca de chocolate suizo. Y encima dejó el trabajo inacabado.

El caso, que podría calificarse casi de picassiano (por los tonos blancos y negros estilo Guernica) elegidos para decorar a la becerra, ha sido motivo de sorna en los medios del país andino. La mayoría ha destacado la poca habilidad de la ladrona al dejar la cabeza del animal con el tono original. Vamos que la pobre parecía desteñida.

Este curioso detalle hizo sospechar a una ‘ronda campesina’ (guardianes comunales) que vieron pasar a la mujer con ‘Milka‘ (no es que quiera hacer publicidad, pero es un nombre que me viene que ni ‘pintado’).

Los ‘ronderos’ intervinieron al detectar las raras manchas negras que tenía la vaca y avisaron a la policía de Cajamarca, lo que permitió descubrir que la cuatrera las había pintado con tinte negro para el cabello.

Con lo bonita y moderna que habría quedado en tonos violetas. Ya que el final era acabar entre rejas (por patosa con los pinceles), que mejor que entrar en la cárcel por la puerta grande siendo la ladrona de ganado más fashion de la comarca.

(Fotos: Edwin Zambrano – Enlace Regional / YOUTUBE y Happolati / WIKIMEDIA COMMONS)