Un curioso caso ocurrió en la localidad estadounidense de Roanoke, Virginia, ya que un oso negro, con más hambre que Yogui, logró abrir la puerta de un vehículo y quedó encerrado dentro del mismo cuando buscaba algo que llevarse a la boca.
El dueño del coche, Ryan McClanahan, escuchó el ruido de un claxon que hizo que se levantara en plena madrugada. La sorpresa fue morrocotuda cuando vio que el asiento del conductor de su SUV estaba ocupado por un plantígrado de grandes dimensiones, que tocaba la bocina como si no hubiera un mañana. O-O
Igualito que Yogui.
Como el automóvil no presentaba ninguna clase de daños, los agentes de policía, que acudieron al lugar tras la llamada de McClanahan, creen que el animal abrió la puerta y se quedó encerrado dentro. Por este motivo, desesperado, comenzó a golpear el volante y por casualidad tocó el claxon.
Finalmente, Mr. Bear se arriesgó más de la cuenta y abrió la puerta del vehículo, momento que aprovechó el oso para poner ‘patas en polvorosa’ camino de un bosque cercano, dejando bien a las claras lo nervioso que estaba. ¡¡¡Menudo susto!!!
(Fotos: Ryan McClanahan – FACEBOOK / Hanna-Barbera)
Rocaba el claxon porqeu lo qe quería era que se moviera de uan vez la casa que tenía delante que tenía ganas de marcarse una escapada por la autopista linfiernoooyeeeah
15 mayo 2017 | 10:56
Esto llega a pasar en España, y un oso menos… Aquí se habría solucionado matándolo como se estila cada vez que un animal baja de las montañas por la falta de alimentos. Los españolitos somos los matarifes de la fauna propia.
15 mayo 2017 | 14:10
Efectivamente, aquí se va a lo rápido, fácil y, sobre todo, barato.
Agradecer al dueño del coche, que pidiera ayuda, y no dañara al «ocupa». Los osos negros son sumamente inteligentes, no es extraño que accediera al coche por la puerta.
15 mayo 2017 | 19:21