Apuesta que cruza una piscina por un listón y el resultado fue muy doloroso

¡Ay el mundo de las apuesta! (con un largo suspiro de reflexión), ese en el que se demuestra a los compañeros, amiguetes, colegas el valor para realizar cualquier reto imposible; ese en el que el «Y yo más» te lleva a un tortazo sin remisión; o ese en el que el cerebro no ejerce su poder y deja trabajar a otras partes del cuerpo.

Pues esta vez os traigo un caso de esos en el que el desafío dejó a su ‘intérprete principal’ con un dolor de… (poned vosotros el sustantivo) como el de un adolescente con las hormonas desatadas antes de un baile de graduación.

Así se sintió Mr. Eggs o casi.

El caballero protagonista del vídeo, que apostó 90 euros a que atravesaba una piscina casi como Moisés cruzó el mar Rojo, no calculó bien la resistencia de los materiales, y ese pequeño detalle le costó muy caro, carísimo. ¡¡¡Un planchazo de proporciones bíblicas, faraónicas, universales!!!

El desenlace de tan ‘magna (tonta) acción’ (las dos cosas valen para calificar el ‘paseito por el alambre’) fue un vuelo doloroso que acabó, como no podía ser de otra manera, con Mr. Eggs empapado y con sálvese la parte más hinchada que un globo en un festival aerostático.

PD. Este vídeo me ha hecho recordar otras grandes caídas de la historia de internet.

La caída de Edgar

Ni él mismo pensó que pudiera volar tan alto

(Fotos:  ViralHog – YOUTUBE / Pixabay)

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