Nick Stafford, un residente de la ciudad estadounidense de Lebanon, Virginia (EE UU), llevó al Departamento de Transporte cinco carretillas con cerca de 300.000 monedas a cuenta de los impuestos no pagados, según Bristol Herald Courier. O-O El Tío Gilito es un aprendiz al lado de este ahorrador.
El caballero decidió dar una lección a los funcionarios locales. Durante mucho tiempo, Stafford intentó averiguar cómo tenía que pagar las tasas de dos nuevos coches adquiridos para la familia. Sin embargo, los representantes del departamento no le proporcionaron suficientes datos, lo que, según el ‘Sr. Cerdito’ (por eso de las huchas y tal), va en contra de la Ley de Libertad de Información.
«Ellos van a seguir causándome problemas, así que voy a asegurarme de que también se sientan incómodos«, indicó Stafford en una entrevista.
Un calco del Tío Gilito.
Después de varios meses de tira y afloja, demandó al citado departamento pero el juez desestimó la denuncia, alegando que un representante del fiscal general del estado entregó a ‘Mr. Penny’ una lista de números de teléfonos para ponerse en contacto con las oficinas del organismo.
No contento con el dictamen del magistrado, Stafford comprobó que el impuesto que tenía que pagar ascendía a 3.000 dólares (2.850 euros), así que se fue a su banco indicó que quería 300.000 monedas de un centavo, las cargó en cinco carretillas y las llevó en su camioneta al departamento. Once funcionarios estuvieron unos cuantas horas contando la ‘farónica cantidad de cobre’. La venganza es un plato que se sirve frío.
PD. De regalo os dejo otras historias de amantes de las monedas. Una especie de moda entre los más ahorradores. 😉
Roba monedas antiguas y las gasta en comprar pizza
Los ladrones torpes, una de mis pequeñas debilidades. Me encantan los que roban una cámara y se graban, los que se quedan atrapados y tienen que llamar a la policía y, sobre todo, los que no tienen ni idea de lo que roban y terminan quedando en evidencia ante todos cuando les pillan.
En ese último grupo entra el protagonista de hoy, nuestro nuevo amigo Dakoda Garren, de 19 años. Dakoda, como supondréis, es un ladrón, pero no un ladrón cualquiera. Es un ladrón de Vancouver (Canadá) que entró en una vivienda y se llevó una colección de monedas antiguas valoradas en casi 77.000 euros. Lee el resto de la entrada »
Ingresa en un banco 226 kilos de monedas que ahorró durante 65 años
Ira Keys es un jubilado, de Slaton (Texas), que tomó al pie de la letra el consejo que le dio su padre cuanto tenía diecisiete años: «Si puedes, intenta guardar todos los centavos que caigan en tus manos«. Pues dicho y hecho. Desde 1952, Mr. Penny (centavo) acumuló pacientemente 226 kilos de monedas que guardó en botes de pintura. ¡¡¡Mi tesoro!!!
«Cada vez que iba a comprar y me daban las vueltas, guardaba todas las monedas de un centavo«, indicó Keys en una entrevista. «Después de tantos años, pensé que era el momento de ingresar el dinero en un banco. Quería saber cuánto tenía ahorrado«, añadió. Lee el resto de la entrada »
Detenida por robar el bote de las propinas mientras la entrevistaban para trabajar
El caso de esta mujer de Rehoboth Beach, en Delaware (EE UU) es digno de estudio. En vez de presentar un currículum impecable o intentar agradar al que puede ser su futuro jefe, sólo se le ocurrió la fastuosa idea de robar el dinero de las propinas prácticamente en la cara del dueño del restaurante. Que poco conocimiento tienen algunos. Lee el resto de la entrada »
(Foto: Inside Edition – YOUTUBE / The Pizza Review)
Aplausos para él. Como broma seria no tiene precio.
17 enero 2017 | 14:38
Nada nuevo, pero si ejemplarizante.
17 enero 2017 | 18:44
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Supongo que el también las habrá tenido que contar por lo que de broma nada.
17 enero 2017 | 19:06
Algo así sucedió en Las Palmas, le reclamaban a una persona una multa y al final terminó llevando las 10000 pesetas en moneditas de peseta. Tuvieron que poner a tres funcionarios a contarlas, bueno al menos así trabajaron algo.
17 enero 2017 | 19:57
Recuerdan aquel que diu
Que había un hombre que todos los días tomaba un café y pagaba las 12 pesetas tirándolas a la otra parte de la barra por lo que el camarero siempre tenía que buscarlas y contarlas. Un día el hombre pagó con una moneda de 25 pesetas por lo que se dijo el camarero ¡esta es la mía! Y en vez de poner el cambio en la barra tiró las 13 pesetas al suelo de la parte que estaba el cliente que en vez de agacharse y recoger el cambio dijo al camarero Otro café. De manera que el camarero tuvo que salir y recoger 12 de las 13 pesetas que había tirado.
(NO SE CONTAR CHISTES PERO ERA MAS O MENOS ASÍ)
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LOS PRIMEROS QUE HICIERON ESO DE PAGAR EN CÉNTIMOS FUERON UNOS ESPAÑOLES DEL PC A LOS QUE LES PUSIERON UNA MULTA DE 1000 EUROS.
17 enero 2017 | 20:09