Harto y molesto por los estrictos controles de viajeros en los aeropuertos, Georgy Myakinkin, de 31 años, decidió desnudarse frente a los guardias de seguridad en la terminal de Púlkovo, en San Petersburgo, Rusia. Al hombre le tocaron un poco la moral, por no decir los…
De acuerdo con la versión de Myankinkin publicada en el Daily Mail, la petición de quitarse el cinturón y depositar los objetos metálicos en una bandeja fue realizada en una zona en la que no está permitido hacerlo.
«Estábamos en la entrada de la estación de tren, no en el área de embarque. Conozco las reglas. Los policías me querían sacar del aeropuerto por no quitarme el cinturón, así que me desnudé«, explicó.
Para qué cortarse, así seguro que los agentes tenían motivos para detenerlo por exhibicionista. Pero todo lo contrario, se quedaron tan desconcertados que sólo pudieron decirle que se vistiera.
En pocas horas, ‘Mr. Naked’ se convirtió en una ‘celebridad’ en las redes sociales después de que se filtrara el vídeo con su acto de protesta. Por su parte, un portavoz del departamento de transporte del Ministerio de Interior ruso aseguró que se investigará el suceso.
(Foto: captura de Youtube)
Con dos y colgando.
18 febrero 2015 | 10:37
Dos cosillas.
Veo que hay un arco detector, hay uno en la entrada de la estación y otro en la sala de embarque?, según leo en la noticia debe de ser así.
Dos. Fijarse cómo les enseña en ojete . Desde luego este chico no oculta nada. Tampoco veo yo que le digan que se vista inmediatamente.
me parece de puta madre. menudo coñazo los embarques. todo sea por nuestra seguridad, espero.
18 febrero 2015 | 10:39
Se nota que tiene buen cuerpo delgado y cuidado y aprovecha cualquiér ocasión para exibirse publicamente.su mente enferma de edonismo,endiosamiento y vanidád le hace desnudarse en cualquiér parte.es un loco enfermo de vanidád y un rompeespejos.si fuera un obeso mórbido y compulsivo no se desnudaria con tanta alegria.
18 febrero 2015 | 10:42
Me gustaría conocer tu opinión acerca de las manifestaciones y las manifestantes de Femen.
Para mí, se manifiestan en actos que ni les van ni les vienen. A este chico, al menos, le han estado tocando las narices; a él particularmente, no a otros)
Casi mejor no hablar de sus cuerpos. Este chico, por lo menos, tiene buen cuerpo. Las manifestantes de Femen parecen bolleras que no tienen otra oportunidad de que las vean desnudas si no es así, porque no hay dios (o diosa) que quiera nada con ellas.
Me alegro de que seas sicólogo astral pero quizás deberías visitar un psiquiatra.
18 febrero 2015 | 11:48
En Youtube, por supuestísimo, santo lugar don de los tataranietos de torquemada hallan calor a sus represiones, l avisión del cuerpo humano al natural está censurado. Debe ser qeu los de la comunidad famosa, libre, sí, por supuestísimo, no se la ha visto hasta llegar a los 18, ni siquiera cuando van a orinar….
Y ué decir de facebook, de instagram, ohhh, los grandes santos lugares donde el cuepro est´prohibido. Qué razón la qu easiste a esta especie nuestra, qu´etemor a su cuerpo, oh, cielo bendito….
18 febrero 2015 | 11:54
Me parece una buena manera de PROTESTA ya que no le quedo otra opción a este ciudadano.
18 febrero 2015 | 14:17
No quiero ver hombres desnudos en ningun sitio.
18 febrero 2015 | 15:50
para el Sr Intolerante Sicólogo Astrál
si no quieres ver hombres desnudos pues no mires, nadie te obliga de mirar, tan facil es
18 febrero 2015 | 17:07
COMPRENDO AL SEÑOR MYAKINKIN
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…Pues sí, amigo Becario, todos nos sentimos un poco reflejados en el señor Myakinkin. Hay veces que las medidas de seguridad de algunos establecimientos son tan extremas, que a uno también le dan ganas de desnudarse entero y hasta de tirarse una pedorreta a cuatro patas. Y digo esto porque mi caso es parecido. No con los controles de los aeropuertos o estaciones de trenes, sino con los sistemas antirrobo de las tiendas. Me pitan siempre, amigo Becario, incluso cuando no me guardo ninguna chuchería en el bolsillo.
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…Le cuento. Llevo notando desde hace tiempo que cuando entro y salgo de una tienda (llámese ECI, Mercadona, Carrefour, Corte Inglés, Fnac, etc.), el muy cabrito del detector me pita. La primera vez vale; la segunda, la tercera… pero a la sexta ya resulta bastante molesto desfilar una y otra vez delante del segurata como si uno fuera un terrorista checheno. Amén del cachondeito de la gente, los dedos acusadores de los niños, las miradas inquisitoriales de las ancianas, etc.
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…He probado a quedarme al lado del detector e ir pasando poco a poco el cuerpo. Primero una pierna, luego la otra, a continuación los brazos, mientras arqueo la espalda hacia atrás, como si estuviera bailando el baile de la pértiga. Pero justo cuando me enderezo (pipipipi) el chivato va y me pita. Sé que no es culpa del móvil, las llaves, la navajilla del calcetín o el ipod, porque últimamente me los dejo en casa cuando bajo a comprar. Y como no llevo anillos ni ninguna zarandaja (piercings, pendientes, collares…) no me imagino qué podrá ser.
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…Hay quien me ha asegurado se debe, o bien a que tengo rayada la banda magnética de la tarjeta o bien a mis zapatillas de deporte nuevas. Ya sabe usted que, con la crisis, las grandes superficies han reforzado las medidas de seguridad de sus artículos. Ya no sólo llevan la clásica etiqueta dura de resonancia magnética, sino también una aguja de cobre ensartada en el calzado o un hilo en los productos de alimentación. Si uno, pongo por caso, deja sus mocasines viejos en la estantería y se calza unos nuevos –después de partir la etiqueta de plástico– también le puede pitar la dichosa alarma a la salida. O en otro establecimiento. O dentro de 3 meses.
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…Todo esto me está superando mucho, amigo Becario, como al señor myakinkin. Porque ahora, cuando estoy falto de dinero, tengo que prepararme los bocadillos de caballa (que me gustan mucho) dentro de la tienda y comérmelos allí mismo antes de irme a mi casa, no sea que mi ropa me pite a la salida, y no la cuña de queso manchego o la media butifarra catalana que lleve en el bolsillo para la cena.
19 febrero 2015 | 1:30