Os lo contamos ayer en 20minutos.es (incluso con un encuentro digital mío con los lectores) y hoy en nuestras ediciones impresas: hoy se cumplen 10 años del nacimiento de nuestro diario. El 3 de febrero de 2000 lanzamos el Madrid y m@s, «el primer diario que no se vende» (ya estaba esta frase junto a la cabecera, y ahí sigue), al que un año después cambiamos de nombre para pasar a llamarlo 20 minutos.
Tengo aquel primer ejemplar impreso delante. El titular grande de portada dice: «Las hipotecas y los créditos de consumo serán pronto más caros»; y el subtítulo: «EE UU subió ayer los tipos, y hoy estudia hacerlo el Banco Central Europeo». El segundo titular es así: «Los institutos prohíben a los alumnos el uso de móvil en clase». La foto es de un partido de la noche anterior en el que el Atlético de Madrid se clasificó para los cuartos de final de la Copa tras eliminar al Real Unión de Irún…
Estamos preparando un número especial de repaso a la década, un número en que hablaremos poco de nosotros mismos y mucho más de los cambios más relevantes que se han producido en el mundo. Lo repartiremos en unos días en nuestras 15 ciudades, con 800.000 ejemplares de tirada. Pero quitándole el polvo a viejos papeles que estoy manejando para ese número he encontrado uno que hice en esos años fundacionales y que os voy a reproducir aquí porque creo que contiene algunas de las claves que explican nuestro éxito. El documento se titula «Los 16 mandamientos. Cómo y por qué hacemos nuestra portada», probablemente lo escribí y distribuí en nuestra redacción en el año 2002. Creo que os ayudará a entender cómo aquel modestísimo proyecto periodístico que pusimos en marcha una veintena de personas acabó convirtiendo a 20 minutos en el diario impreso más leído de España, por encima de todos los demás, incluidos los de pago; a 20minutos.es en el tercer diario on line más visitado y a Calle 20 en el mensual líder de cultura y tendencias. Ahí va:
«Los 16 mandamientos
Cómo y por qué hacemos nuestra portada.
UNO- A interés similar, preferimos lo local a lo nacional, lo nacional a lo internacional, lo cercano a lo lejano, lo caliente a lo frío, las historias a las estadísticas, las informaciones de sociedad a las de política, las que tienen nombres propios a las que sólo tienen números.
DOS- Preferimos las noticias buenas a las malas, las positivas a las negativas.
TRES- Debemos dar lo importante, pero también lo interesante. A lo interesante, además, lo valoramos un poco más de lo que le correspondería.
CUATRO- La vida ciudadana en toda su extensión -(el tráfico, el transporte, la seguridad, el medio ambiente, el urbanismo, la vivienda, la inmigración…), (el trabajo, los salarios, los precios, los impuestos, el consumo, la economía doméstica, la salud, la enseñanza, las relaciones personales, la revolución tecnológica…), (los deportes, el ocio, las tendencias y formas de vida, los espectáculos, la televisión…)- es el principal campo de información que cultivamos.
CINCO- Al valorar cada información nos preguntamos por sistema a cuánta gente le afecta directamente lo que contamos.
SEIS- En nuestra primera página ha de estar casi por sistema (y casi siempre mucho más pequeña) la información que previsiblemente va a ser la más grande en la primera página de los diarios de pago.
SIETE- Siempre hemos de llevar alguna información útil.
OCHO- Siempre hemos de poner algo (o mucho) que tenga especial interés para las mujeres, que son la mitad de nuestro público.
NUEVE- Siempre hemos de poner algo (o mucho) que tenga especial interés para los jóvenes, que son la mitad de nuestro público.
DIEZ- Pero no olvidamos que somos un diario familiar: siempre hemos de preguntarnos si los campos de interés de todos los miembros de la familia están representados en nuestra portada.
ONCE- El cóctel final ha de ser equilibrado: con todos los ingredientes enumerados, pero ninguno en demasía.
DOCE- Nuestro diario informa, entretiene, da servicio y crea comunidad de lectores. Esos cuatro conceptos han de estar en la primera página.
TRECE- Algunos titulares han de hacerle un guiño cómplice al lector. Y en uno de ellos hemos de buscar por sistema un toque de humor en algún rincón de la primera página. Alguno o algunos de los titulares no ha de ser informativo/objetivo, sino emotivo/subjetivo.
CATORCE- A la hora de elegir la foto principal y el resto de imágenes de primera, buscamos lo espectacular, lo poco visto, lo insólito. Huimos de lo trillado, lo previsible, lo muy visto. Si las imágenes de que disponemos no son muy singulares, tratamos de darles más vida al editarlas: con un corte diferente, un recorrido, un silueteado…
QUINCE- En la medida de lo posible, ha de haber un segundo logo de 20 minutos en la portada, además del de cabecera. Para una ‘Campaña 20 minutos’, un ‘Dile a’, un ‘Pasa el diario’, un suplemento, una información sobre algún evento que patrocinemos.
Y DIECISEIS. Todos estos mandamientos han de tenerse en cuenta también a la hora de elaborar las distintas secciones de 20 minutos. Es más: si no se tienen en cuenta, difícilmente podremos hacer una portada que los cumpla.
Aún hoy, muchos de los mandamientos los tenemos vigentes.