¡Que paren las máquinas! ¡Que paren las máquinas!

¡Que paren las máquinas! El director de 20 minutos y de 20minutos.es cuenta, entre otras cosas, algunas interioridades del diario

Archivo de octubre, 2013

El mercado online solo tiene una frontera: la lengua

Anoche entregamos los premios anuales de AEEPP, la asociación de editores de prensa de la que soy presidente desde 2004.
Llevo tres mandatos electorales; el último -de 2012- concluye en 2016. El colectivo de nuestros asociados es para sentirse muy orgulloso. AEEPP es la organización empresarial de editores de prensa con mayor número de asociados -más de un centenar, con más de 700 cabeceras-, y la única que forma parte de las organizaciones empresariales nacionales, CEOE y Cepyme. Entre los miembros de AEEPP están los propietarios de algunos de los medios más difundidos y leídos (como 20minutos, el diario que dirijo), innovadores y activos del sector. Son editores que sacan al mercado publicaciones gratuitas y de pago; de quiosco y de suscripción; diarios, semanales, quincenales, mensuales…; de información general y de información sectorial o especializada; en soportes impresos o en digitales… Por la diversidad de la oferta de nuestros asociados, AEEPP es la organización sectorial que mejor representa a la edición de prensa en España.
En nuestra entrega de premios de anoche nos acompañó la Princesa de Asturias, que como sabéis fue periodista y -como comentábamos en los corrillos después de acto- lleva aún muy dentro el impulso del periodismo y de la comunicación. «El periodismo sigue vivo y sigue siendo uno de los pilares de toda democracia en las sociedades libres, cohesionadas y sensatas», dijo en su intervención. Y a los editores: «Solo vosotros sabéis lo que significa ese esfuerzo, lo que quiere decir que cada día o cada mes tengáis en vuestras manos o en vuestras pantallas esa publicación después de muchas horas, muchos problemas y todo el trabajo».
La entrega de los Premios Editores -siempre en otoño- es uno de nuestros dos grandes eventos anuales. El otro es el Congreso, en primavera. En el último, en mayo pasado, en mi intervención de apertura del acto diserté sobre el futuro de los medios. En mi intervención de anoche, mucho más corta, hablé de asuntos del presente, algunos polémicos. Dije esto:

Para la asociación de editores, para AEEPP, este ha sido un año muy intenso. Hemos trabajado mucho en muchos campos, y especialmente en dos:

Uno. Ayudando a nuestros asociados en su transformación digital, que es probablemente el mayor reto al que se enfrenta el mundo de la comunicación, de la información y del periodismo.

Dos. Fomentando la transparencia en el sector, la igualdad de oportunidades, la no competencia desleal. En este último campo, hay un asunto específico que nos preocupa mucho a todos y que no me resisto esta noche a mencionar: la publicidad institucional, la publicidad que hacen los organismos púbicos con dinero público. Durante estos últimos meses, hemos tenido reuniones con todos los grupos políticos para pedirles que mejore la gestión de ese dinero público, para proponerles fórmulas para que todos los organismos, sean de la Administración Central, de la Autonómica o de la Local, sirvan mejor a los destinatarios legítimos de ese tipo de publicidad, que son los ciudadanos. Gestionar mejor la publicidad institucional sería bueno para todos: para las instituciones, para la clase política, para los ciudadanos y para los medios. Todos ganaríamos en transparencia, en democracia, en Estado de Derecho. Los medios ganaríamos además en independencia y en credibilidad.
Este año, como los cinco últimos, ha sido también difícil para los editores de prensa y de publicaciones periódicas. Estamos aún en el medio de una tormenta perfecta que son la suma de dos grandes crisis. La crisis económica coyuntural que sacude a toda la sociedad española y la crisis estructural que está sacudiendo especialmente a nuestro sector, obligado a reconvertirse a toda prisa en medio de una revolución tecnológica que está cambiando los hábitos, las conductas y los comportamientos de nuestros lectores y de nuestros anunciantes.
Pero aun así, aun en mitad de esa tormenta perfecta, los editores seguimos sacando adelante nuestros medios y nuestras empresas y seguimos incluso lanzando proyectos nuevos.
Este impulso renovado, este sacar fuerzas de flaquezas es lo que va a ser premiado esta noche. Mi enhorabuena a todos los que van a recibir premio y mi enhorabuena también a los muchísimos colegas que lo merecen y que sin duda lo obtendrán en las próximas ediciones.

Nos llevamos uno de los galardones, el Premio a la Internacionalización, por nuestra expansión en América con las ediciones para Estados Unidos, 20minutos.com, y para México, 20minutos.com.mx, que lanzamos a finales de 2012. ¿Habrá más ediciones en países americanos?, me preguntaba anoche un colega. Quizás.

Internet está cambiando muchas cosas en el mundo de la comunicación y del periodismo. Una de ellas, las fronteras de los mercados. Con el papel, el mercado de un diario es un espacio geográfico y político -una ciudad, una provincia, una comunidad autónoma, un Estado- al que se lleva a toda prisa un producto físico: el medio impreso. La frontera está en el límite del alcance del sistema de impresión y de distribución física establecidos (carísimos, por cierto). Con Internet, con la distribución virtual del medio, el mercado es mucho más amplio y cubrirlo mucho más barato, porque sólo tiene la frontera de la lengua. Los medios en castellano estamos de suerte. Nuestro mercado potencial son los 500 millones de hispanohablantes que hay en el mundo. Y creciendo.

Goteo de excarcelaciones hasta Navidad

Los dirigentes del PP que ayer se sumaron a la concentración convocada por las víctimas de ETA recibieron abucheos y gritos de «traidores». Culminaba así una semana especialmente tensa en la que ni el Gobierno ni su presidente ni el Partido Popular supieron reaccionar a la sentencia de Estrasburgo que consideraba ilegal el alargamiento de prisión de muchos presos por la llamada doctrina Parot.
Desde el Gobierno y desde el PP -que en el poder y en la oposición siempre ha utilizado a las víctimas para tratar de buscar ventaja política-, se ha intentado descargar ahora la responsabilidad de la sentencia contra el PSOE, contra Zapatero, contra las instituciones europeas, contra la Justicia española… En la Audiencia Nacional, el órgano judicial que más peticiones de excarcelación de etarras tendrá que afrontar, se palpa estos días un indisimulado malestar contra esas maniobras del Gobierno y del partido que lo sustenta. Molestan especialmente las críticas a lo rápida que fue la excarcelación de Inés del Río y las presiones para que ahora se demore la libertad de otros etarras.
No habrá tal demora. Un alto funcionario de la Audiencia Nacional cree que asistiremos a un goteo de excarcelaciones en las próximas semanas, y que casi todas las previstas estarán concluidas en Navidad. ¿Y habrá alguna salida masiva? «Es improbable. Cada caso es distinto, con muchos matices en función de la condena, las redenciones, los beneficios penitenciarios…». La foto de un grupo nutrido de etarras sonrientes a la salida de prisión es difícil que se produzca.

Buenos y malos datos en la EPA

La Encuesta de Población Activa (EPA) del tercer trimestre del año está llena de indicadores sobre la economía española. Algunos buenos, sobre todo en la comparación con el segundo trimestre; y muchos malos, sobre todo si se compara con la misma encuesta de hace un año. Ahí va el resumen que he hecho esta mañana vía Twitter:

12 indicios de que la recuperación económica ni ha llegado ni se la espera

Con muchos y graves frentes políticos abiertos (la crisis económica, Bárcenas, Cataluña, la tensión territorial incluso en sus propias filas, las malas perspectivas electorales…), el Gobierno de Mariano Rajoy lleva unas semanas predicando la buena nueva de la recuperación económica y colocando el mensaje en los muchos medios de comunicación que controla o modula. ¿Con qué argumentos? Con estos tres, fundamentalmente:
1 – Unos buenos datos del sector exterior (exportaciones y turismo).
2 – Una mejora de la prima de riesgo. Está en torno a los 240 puntos, que está muy bien respecto a los 600 en que anduvo hace poco más de un año; pero cuando Zapatero la tenía a 240 ya le parecía inaceptable a muchos de los que hoy se lo celebran a Rajoy.
3 – La recuperación de la Bolsa: en junio el Ibex superaba por poco los 7.500 puntos y ahora anda en los 10.000.
Son buenos indicadores, sin duda. Son un buen punto de partida. Pero hay muchísimos otros que apuntan a la contrario, que insisten en que la recuperación aún no ha llegado ni se la ve en el horizonte. Son indicadores que afectan directamente a las personas, a los ciudadanos. Ahí van algunos:
1 – El dato más reciente de paro registrado, el de septiembre, es récord negativo de todos los septiembres: 4.724.355 parados, 25.572 más que un mes antes, 19.076 más que un año antes.
2 – El dato más reciente de afiliados a la Seguridad Social, el de septiembre, es el peor de septiembre de toda la crisis: 16.305.445 afiliados a la Seguridad Social, 22.242 menos que un mes antes, 504.358 menos que un año antes. Hay que irse a hace 11 años para encontrar uno peor.
3 – La cobertura a los parados (el porcentaje de ellos que reciben algún subsidio) está cayendo. En agosto pasado (último dato disponible) llegaba al 64,46% de los desempleados. Un año antes estaba en el 67,31%.
4 – Recorte tajante en las prestaciones a los parados: el gasto medio total en agosto de 2013 (último dato conocido) fue de 2.463,8 millones, un 7,1% menos que un año antes.
5 – El gasto medio en cada parado también ha bajado: de 917,88 euros en agosto de 2012 a 875,62 en agosto de este año.
6 – El consumo está plano o hundido, según sectores. Uno de sus principales indicadores, las ventas del comercio minorista, lleva 38 meses seguidos cayendo, desde que en agosto de 2010 Zapatero desató los primeros recortes.
7 – Otro de los indicadores de consumo, el Indicador Mensual de Confianza del Consumidor (ICC), mejora, pero muy poco a poco. Es un índice de 200 puntos. Está en 69,8, aún muy lejos del aprobado, que sería 100. Entre 0 y 100 puntos, indica que los ciudadanos tiene una percepción desfavorable sobre cómo va la economía; entre 100 y 200 indica una percepción favorable.
8 – A los 2,8 millones de funcionarios se les ha congelado el salario, por cuarto año consecutivo.
9 – Los pensionistas -9 millones en el sistema público- van a perder poder adquisitivo en enero, al subírseles las pensiones menos que el IPC.
10 – Los salarios medios de la mayoría de la población asalariada se están abaratando, según indican las estadísticas oficiales (y por más que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, lo niegue).
Y por si el panorama no fuera suficientemente sombrío, dos datos que indican que lo que sí está llegando con fuerza es la dualización de la sociedad española, el aumento galopante de la desigualdad:
11- Según Cáritas, en España tres millones de personas viven en pobreza severa, con menos de 307 euros al mes. Hace cinco años, al comienzo de la crisis, había 1,5 millones. La cifra se ha duplicado.
y 12 – Según Credit Suisse, el número de millonarios (de personas con un patrimonio igual o superior al millón de dólares -unos 740.121 euros- ha aumentado en 47.000 en España en el último año.
Para estos últimos, parece que sí: la recuperación ya ha llegado.

La semana 42/2013, en 9 tuits

«¿Tiene un exministro que morirse de hambre?»

El vicepremio Planeta 2013 para Ángeles González Sinde (ha sido finalista, y recibirá por ello 150.000 euros) ha desatado una pequeña polémica sobre si es compatible el galardón con el cargo de ministra que Sinde desempeñó hasta diciembre de 2011. La ley establece a los exministros una serie de incompatibilidades durante dos años en los sectores económicos con los que se hubieran relacionado en su función pública. Sinde fue hasta hace dos años menos dos meses titular del Ministerio de Cultura, y quien le concede el galardón es una de las empresas españolas más potentes del ramo, el grupo editorial Planeta. ¿Es aplicable en este caso la incompatibilidad, hay motivo para el escándalo?
He preguntado a varios exministros sobre el asunto, todo ellos miembros del Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero al que perteneció Sinde, y me han contestado cuatro, dos mujeres y dos hombres. Todos salen en defensa de su compañera de Ejecutivo, si bien con diferentes matices y argumentos.
– A mí me parece muy bien [el premio]. ¿O es que acaso ser ministra te inhabilita para crear, escribir…? ¡Ya esta bien de tratar a los políticos como sospechosos! -dice uno.
– No se puede impedir a un escritor que escriba -dice otro.
– Estoy encantado, porque [el premio] nos rehabilita un poco a todos. Ese «Gobierno de ignorantes y poco preparados…» -apunta un tercero, con ironía- Y el premio lo da un jurado que no es de la empresa y que no sabe a quién premia, es anónimo.
Con un cuarto he tenido un cierto debate:
– Escribir es su profesión y lleva dos años apartada de cualquier responsabilidad política. Si ni siquiera puede escribir, ¿tendría que vivir de la caridad? Creo que las cosas se llevan al extremo.
– Pero aún no han pasado dos años de su salida del Gobierno y recibe dinero del sector que ella administraba -replico.
– ¿Hubiera sido diferente dos años y un día después? Y además, es su profesión. ¿De qué debe vivir un exministro? Creo que el asunto se lleva al extremo. Nadie podrá dar un paso hacia la política si a la vuelta tienes que morirte de hambre. Te aseguro que a muchos pasar por el Gobierno nos costó dinero. Y la situación en que quedamos al salir del ministerio no está bien resuelta.

La semana 41/2013, en 14 tuits

Susana Díaz, heroína o villana

Desde que llegó a la presidencia de la Junta de Andalucía, hace apenas un mes, Susana Díaz es tema de conversación frecuente en los cenáculos políticos madrileños de uno y otro signo.
A un ministro actual (del PP, claro) le he oído pintarla como una extremista peligrosa que, ayudada por IU, estaría cebando en Andalucía poco menos que una revolución. A otro dirigente del PP, sin embargo, le he escuchado deshacerse en elogios hacia ella, y no solo por su posición sobre Cataluña.
Un exministro (del PSOE) y un barón territorial actual (también del PSOE), por separado, hablan de ella como una dirigente política excepcional. Sin embargo, una exministra (también del PSOE) critica su falta de trayectoria profesional o social fuera del partido, otro alto dirigente socialista la dibuja como una arribista que acabará con sus propios padrinos y un tercero habla de ella por encima del hombro, con prepotencia intelectual y económica.
«Viene de verdad de la clase baja», le he oído decir a otro, y por la forma en que entonó la frase no quedaba claro si era un piropo o una pulla. Quizás las dos cosas.
La prensa partidista también está dividida. Medios que se dicen de izquierda recelan de Susana Díaz, y los de derecha pura comienzan a alabarla, algunos con desmesura, bien es verdad que fundamentalmente para sacudir a Rubalcaba, como hicieron hace unos años con Tomás Gómez, el líder socialista madrileño que se enfrentó al aparato federal.
Diosa o diablesa, heroína o villana, lideresa o trepa, lo cierto es que la nueva presidenta andaluza e inminente jefa máxima de los socialistas andaluces (será secretaria general del PSOE-A en noviembre) está poniendo distancia con el inmediato pasado socialista de Andalucía y con el presente actual de Ferraz y se está moviendo ya con voz propia en todo el ámbito estatal.
¿No será la tapada para las elecciones generales de 2015, y ni Rubalcaba ni Chacón ni Madina…?, he preguntado. Y me responde uno: «Si ella quiere, lo sería: Andalucía tiene una cuarta parte de toda la militancia socialista». Otro: «Mujer, joven [38 años, cumple 39 la próxima semana], de la clase trabajadora, diferente, con experiencia de gobierno… ¿Por qué no? Ganaría a Rajoy o a quien presente el PP». Y otro: «¡Espero que no!».

El Mediterráneo Occidental, falla demográfica

En el Mediterráneo Occidental, no sólo confluyen dos placas tectónicas, la Euroasiática y la Africana, que con cierta frecuencia, por fricción entre ellas, provocan fallas geológicas y terremotos y erupciones volcánicas y otras tragedias geológicas. En el Mediterráneo Occidental también confluyen dos placas, dos mundos económicos y tecnológicos que friccionan y provocan una falla demográfica que rompe en tragedias humanas.
La del Mediterráneo Occidental es una de las grandes fallas demográficas del mundo, uno de los puntos cuyas dos orillas están a menor distancia física y a mayor distancia económica. La tentación de la migración masiva, aunque sea ilegal para los del norte, es irrefrenable para los del sur. Es inevitable y comprensible que miles y miles de personas intenten saltar cada año del tercer mundo al primer mundo, del paupérrimo sur al opulento norte, aunque sea jugándose la vida en una patera o en un barco destartalado en el Estrecho de Gibraltar o en el Canal de Sicilia.
La falla demográfica se va a seguir cobrando muchas vidas, como la semana pasada en Lampedusa, salvo que cambien las placas. La placa del norte, con unas políticas de inmigración más solidarias y comprensivas con el sur, para que nadie tenga que jugarse la vida en alta mar en un cayuco o saltando altas vallas con alambre de espino, y con unas partidas de cooperación internacional más generosas, que mejoren las condiciones de vida y las expectativas de futuro de los africanos en su propia tierra. Y la placa del sur, con procesos de democratización que les permitan a sus pueblos ser dueños también de su futuro político.

Inquietud en la Puerta del Sol

Las malas noticias se agolpan en la sede del Gobierno regional de Madrid, en la Puerta del Sol. Los recortes, el bloqueo judicial de la privatización hospitalaria, algunos desplantes de la exjefa Esperanza Aguirre, el desplome del turismo por la crisis de Iberia y de Barajas, el fiasco de Madrid 2020, la incertidumbre sobre Eurovegas, pendiente de su financiación y de que Rajoy afloje la ley antitabaco… siembran la inquietud en el despacho del presidente regional, Ignacio González, que lleva un año en el cargo, con más sombras que luces. Y la pasada semana, unos Presupuestos del Estado, paupérrimos para la comunidad.
Varias encuestas que se han hecho públicas y otra que se quedó en un cajón indican que el Partido Popular puede perder Madrid -región y ciudad- en las elecciones de 2015. En el PP hay quien aboga por abrir el melón sobre si sus actuales gobernantes son los candidatos idóneos para evitarlo. Ana Botella dio un paso adelante, anunciando sus planes fiscales hasta 2016. Era una forma de decirle al partido que quería seguir, pese al fracaso olímpico. Ignacio González, peor relacionado con el poder central que la alcaldesa, estudia cómo mover ficha.