Arquitectación Arquitectación

Si la arquitectura te rodea, deberías empezar a fijarte en ella

Edificios oficiales: ¿cumplen con sus propias leyes de ahorro energético?

Aunque estos fríos nórdicos nos dejen las orejas como un pimiento morrón en cuanto salimos a la calle, los humanos de a pie no podemos dejar nuestras obligaciones con el fisco y acudimos a los edificios oficiales. Esos mismos edificios oficiales que desde una orden del 2009 no pueden sobrepasar los 21ºC en invierno o bajar de los 26º en verano, si quieren ser los más eficientes, sostenibles y verdes de la marca España y además – ¿como no?- cumplir con las leyes que con tanto fervor y disciplina se empeñan en hacernos cumplir a los ciudadanos.

Adivinaréis, puesto que ya sabéis que no soy de dar buenas nuevas, que la noticia es la contraria, que ayer, mientras me despojaba de gorra, bufanda, guantes, abrigos, americanas y rebecas diversas al entrar en varios edificios oficiales, me iba subiendo el color y el calor, comprobando dos jersey de menos después, que  aquel ambiente pasaba de los 23 de largo, no sé si por exceso de celo de la caldera o por falta de cuidado del termostato, y ganas me dieron de que volvieran aquellos tiempos de la mili en los que se arrestaba a una puerta, una escoba o un barracon entero por haber hecho tropezar a un capitán. Ay, termostatos y calderas, si por mi fuera, ya teníais un precinto puesto.

Ayer vi uno así esperando su turno, se quedó un rato traspuesto y…. (Foto Chesi-Flickr)

Tengo que reconocer que es complicado dejar satisfechos y satisfechas a los usuarios de un edificio. Y en este caso el uso del masculino y el femenino no es protocolario o casual, sino que la sensación de confort en el hombre y la mujer, según he podido comprobar, está a una distancia aproximada de dos grados centígrados, siendo en ellas más fría y en los varones más calurosa y desaforada. No me preguntéis la razón, que seguro que existe biológica, antropológica o incluso metafísicamente. Es -y hablo muy en serio- absolutamente imposible establecer una temperatura de confort universal, por lo que se hace necesario establecer una temperatura óptima en función del sentido común, sabiendo que algunos de los usuarios tendrán frío y deberán estar en la oficina con una chaqueta y otros pasarán algo de calor y estarán en manga corta, todos ellos pondrán a parir al diseñador de la instalación y la mayor parte de ellos no entenderá el porqué de tal desatino, sin embargo, esa temperatura al menos, permitirá un uso lógico y un consumo mesurado. De eso se trata, puesto que con rebeca o en manga corta, estos usuarios sí pueden regular su temperatura corporal a su satisfacción.

Pero la pregunta que traigo hoy aquí, dado el sofoco que me pasé ayer es ¿quien controla que la administración, cumpla sus propias leyes y mantenga las temperaturas que ella misma establece? Recordemos aquí que el consumo energético no es solo una cuestión económica, sino también estratégica, como se han empeñado en enseñarnos en los últimos años.

Nota del arquitectador: En nuestras casas, una temperatura en torno a los 20-21º en invierno mejora mucho la sociabilidad de la pareja en invierno. Por encima de los 22º se le quitan a uno las ganas de tener ganas, como decían los inefables Gomaespuma.

5 comentarios

  1. Dice ser Hermiti

    «……¿quien controla que la administración, cumpla sus propias leyes y mantenga las temperaturas que ella misma establece?»

    En mi opinión, y no necesariamente por este orden:

    – El/la jefe/a de mantenimiento: si está presente, ha ido a currar y le apetece…..

    – El/la currito/a de mantenimiento: en caso de que el estado de los condicionantes del anterior fuere negativo

    – El/la jefazo/a del departemento, negociado u oficina en cuestión, si ya le han hinchado las narices las quejas de unos y otros respecto a la temperatura

    – El / la quejica de turno (que en todas las oficinas existe), cuya única y principal misión en esta vida parece consistir en regular la temperatura de su lugar de trabajo a su antojo.

    En cualquier caso y, basándome en mi experiencia, dudo mucho que ninguno de ellos se base en la normativa existente para decidir cuál es la temperatura que debe mantenerse.

    Siempre he defendido que la concienciación y la educación son condiciiones necesarias pero no suficientes para ser efectivos en las políticas de ahorro y eficiencia energética. Desgraciadamente en este, como en otros muchos temas, lo más eficaz son medidas que nos afecten al bolsillo.

    14 marzo 2013 | 14:46

  2. Muy bueno el artículo de hoy. Raramente se encontrarán edificios públicos cumpliendo la normativa, pero después harán inspecciones…

    14 marzo 2013 | 18:52

  3. Dice ser ¿loa ropa contamina?

    Pues seguir las pautas de la diseñadora Pam Hogg ayudan a ahorrar energía, agua y detergentes, sobre todo lavando ropa y creándola, porque han salido tres modelos totalmente desnudas en su último desfile en la Lodon Fashion Week hace unos días.
    https://www.youtube.com/watch?v=uF3HdAPDwms

    14 marzo 2013 | 20:18

  4. Dice ser Italeri

    «Real Decreto 486/1997, de 14 de abril, por el que se establecen las disposiciones mínimas de seguridad y salud en los lugares de trabajo.

    ANEXO III.
    Condiciones ambientales de los lugares de trabajo.

    3. En los locales de trabajo cerrados deberán cumplirse, en particular, las siguientes condiciones:

    La temperatura de los locales donde se realicen trabajos sedentarios propios de oficinas o similares estará comprendida entre 17 y 27° C.

    La temperatura de los locales donde se realicen trabajos ligeros estará comprendida entre 14 y 25° C.»

    En general, los edificios de la administración entran en el primer supuesto. Si la temperatura se sale de esa escala en cualquier época del año, el trabajador tiene todo el derecho a negarse a trabajar, con ley energética o sin ella.

    14 marzo 2013 | 23:28

  5. Dice ser Arquitectador

    Como verás, estimado Italieri, la orden del 2009, no esta en contra del RD del 97, sino que lo acota limitando la temperatura máxima en invierno y la mínima en verano, es decir, no sobrepasar los 21 en invierno esta dentro de los parametros de ambas leyes. Por otra parte el interes general estara siempre por encima de la sensacion térmica individual, un saludo y gracias por comentar.

    15 marzo 2013 | 08:16

Los comentarios están cerrados.