Entradas etiquetadas como ‘toxoplasmosis’

Más de 3.000 gatos fueron abandonados en 2008 por el nacimiento de un hijo

Hace más de un año ya hablé aquí de la toxoplasmosis y las embarazadas.

Creo que es el momento de insistir.

Os dejo una nota de prensa de EFE de enero, que he descubierto ahora:

Más de 3.000 gatos fueron abandonados en 2008 por el nacimiento de un hijo

El gato casero que come alimentación industrial y acude regularmente al veterinario no se puede infectar de toxoplasmosis.

* Ante el temor de que el bebé pudiera contraer toxoplasmosis.

* Muchos profesionales de la salud han creado «una alarma social».

* Unas pautas básicas de higiene evitan el contagio.

El 13% de los abandonos de gatos que se produjeron en España durante 2008 fue motivado por el nacimiento de un hijo. Eso supone que algo más de 3.000 mininos fueron abandonados.

Los propietarios de estos animales domésticos confiesan que tomaron esta decisión ante el temor de que el bebé pudiera contraer toxoplasmosis.

Así se desprende de un estudio llevado a cabo por la web promiau.com, que ha lanzado una campaña online para luchar contra las falsas creencias sobre esta enfermedad.

Se ha aconsejado de forma equivocada a las embarazadas que no tengan contactos con gatos

El veterinario David Jolis ha confesado que muchos profesionales de la salud han creado «una alarma social» en estos últimos años, aconsejando de forma «equivocada» a las mujeres embarazadas que no tengan contactos con gatos.

Sin embargo, ha aclarado, en la mayoría de los casos los mininos no son transmisores de la enfermedad, «y siguiendo unas pautas básicas de higiene se limita enormemente el riesgo de contraer toxoplasmosis». «Además, el riesgo importante para el feto existe durante el primer trimestre de embarazo y, siguiendo unas pautas para evitar el contagio, éste se reduce de forma drástica», puntualiza Jolis.

¿Cómo se coge la toxoplasmosis?

La infección por toxoplasmosis ocurre principalmente por cuatro vías: por contacto oral con tierra, agua o u hortalizas infectadas; por comer carne infectada, por contacto oral con heces de gato infectadas o por transmisión congénita.

Por ello, «el gato casero que come alimentación industrial y acude regularmente a su veterinario no se puede infectar de la enfermedad», ha prevenido el experto.

El veterinario ha recordado que hay una serie de pautas básicas de higiene para evitar el contagio, como quitar las heces de la bandeja a diario, limpiar ésta con agua caliente y no dar de comer carne cruda al animal.

Toxoplasmosis: gatos y embarazadas

Ayer un familiar que vive con un gato me contaba que desde que una amiga suya se ha quedado embarazada ya no pisa su casa.

Por lo visto esta chica no ha pasado la toxoplasmosis y le han dicho que no tome carne cruda o poco hecha y que evite el contacto con los gatos.

Su reacción es una muestra más del miedo irracional de muchas mujeres a los gatos cuanto están esperando un niño, y que se traduce en miles de abandonos todos los años.

Muchas veces causa de una mala información. En otras ocasiones es la excusa perfecta para deshacerse de un animal que ya empezaba a estorbar.

En realidad, no hay el más mínimo problema. Gatos y embarazadas son completamente compatibles.

Para aquellos casos en los que el problema sea la falta de información, aquí va la explicación:

La toxoplasmosis es una zoonosis (enfermedad que los animales pueden transmitir al hombre, o viceversa). Se trata de una enfermedad invisible, que un porcentaje muy elevado de personas padece sin darse cuenta y desarrolla sin mayor problema las defensas necesarias.

Los felinos son los únicos animales capaces de liberar las formas del parásito, llamado toxoplasma gondii, que contagian al hombre.

No obstante, en la práctica totalidad de los casos el contagio se produce al ingerir los quistes del parásito en la carne poco hecha, verduras mal lavadas, embutidos o huevos crudos.

El problema aparece cuando una mujer que no ha pasado antes esa enfermedad y por tanto no tiene anticuerpos queda embarazada, ya que en caso de enfermar el feto tiene un 40% de posibilidades de sufrir malformaciones.

Por eso muchas mujeres, cuando quedan embarazadas, se deshacen de sus mascotas. Algunas veces mal aconsejadas por sus médicos. Algo completamente innecesario.

A todas las embarazadas se les hacen las pruebas de la toxoplasmosis si se demuestra que ya ha estado en contacto con el parásito, ya no hay de qué preocuparse. De no ser así, el riesgo de contagio sigue siendo mínimo y basta con seguir unas pocas indicaciones para evitarlo.

De lo que realmente debe preocuparse es de comer carne bien hecha y frutas y verduras bien lavadas, que es la principal fuente de contagio.

La mayor parte de los gatos caseros nunca en toda su vida adquieren la toxoplasmosis. Lo que suelen contagiarse son aquellos que hacen vida al aire libre y comen carne cruda (cazan ratones y pajarillos).

Los gatos que adquieren el parásito solo están en disposición de contagiar durante unas dos semanas a lo largo de toda su vida. Ya sería puntería que coincidiera con el embarazo de su dueña.

Los parásitos están en las heces del animal, pero para que sean contagiosos tienen que pasar al menos 24 horas.

Bastaría por tanto con recoger a menudo los excrementos de la caja de arena del animal, empleando guantes y lavándose después bien las manos. O más sencillo: dejando que lo haga otra persona.

—————

Los gatos de las fotos son Spider, Kalina y Félix. Están en adopción en la protectora de Jaca.

Si quieres adoptarlos llama al teléfono 636 65 16 00.