Thiago Alcántara ha querido despedirse de su antiguo club a través de una carta colgada en su cuenta en Twitter. En ella, queda claro que su relación con Sandro Rosell y la directiva no era buena y que es una de las razones de su salida del Barça.
El error que ha cometido el FC Barcelona dejando salir al centrocampista por menos de 25 millones es algo que el club azulgrana puede pagar caro. La proyección del ahora jugador del Bayern es brutal y a las órdenes de Pep Guardiola podrá desplegar su enorme talento.
De ser así, todas las miradas se dirigirán a Sandro Rosell. Primero por esa absurda cláusula en su contrato que le permitía salir por 18 millones de euros si jugaba menos del 60% de los partidos la temporada pasada. Pero también por la carta del jugador, en la que señala de manera indirecta a los que mandan en Can Barça como causantes de su marcha. Ni una sola mención, ni siquiera de pasada, lo que deja claro que Thiago se va con molesto con la zona noble del Camp Nou y con el pensamiento de que no se ha apostado con firmeza por él.
«Compañeros, cuerpo técnico, empleados, aficionados, sobre todo a vosotros, los aficionados, quienes hacéis grande a este club en las alegrías y las derrotas. A todos vosotros, gracias por estos años. Gracias a los que estuvisteis a mi lado en los momentos más difíciles»
En el resto de la carta, Thiago justifica su decisión de abandonar Barcelona para irse al Bayern, la que afirma muy madurada, y muestra su cariño al club en el que ha pasado tantos años.
«Queridos aficionados: salir de la casa que te acogió con catorce años… Una decisión difícil, madurada. Las etapas se cierran, los cambios de rumbo llegan. Ahora tengo la misma ilusión por jugar a fútbol y competir que cuando llegué a Barcelona siendo un niño. Y esa ambición, ilusión y las circunstancias de este deporte me han llevado a Múnich».
Para quien sí que tiene palabras Thiago es para Tito Vilanova, olvidando que el técnico apenas confió en él durante la temporada pasada.
«Y a ti, Tito, enorme luchador… como le dijimos a Abi (Éric Abidal): ‘¿Piedras en el camino? Guárdalas todas, un día construirás un castillo‘. Nadie duda que volverás a salir adelante».