Dice el viejo refrán que somos esclavos de nuestras palabras y dueños de nuestros silencios. De eso sabes tú algo, Antoine. Hace justo un año dijiste que ya comías en la mesa de Cristiano Ronaldo y tu nuevo compañero, Leo Messi. Este verano dijiste que los trenes pasan dos veces y te subiste al del Barça. Hace unos días supimos que sacabas billete para ese tren y te llevabas una propina de 14 millones de euros mientras tus compañeros, porque aún lo eran entonces, se jugaban la vida en Champions contra la Juventus. Ese día, por cierto, no compartiste mesa con el 7 del equipo rival.
Y ya ves. Apenas han pasado unos minutos (mientras escribo estas líneas) de la derrota de tu equipo-tren en Granada y ya veo las redes sociales inundadas de opiniones de tus nuevos hinchas sobre ti. No te van a gustar, Antoine. Ojo, que no todo son opiniones. También leo datos: en los cuatro partidos a domicilio que llevas este año, no has rematado ni una vez a puerta.
0 – Antoine Griezmann no ha realizado ni un solo remate a portería en sus cuatro partidos como visitante con el FC Barcelona en todas las competiciones (seis en total). Acoplamiento. pic.twitter.com/hiKQWrBqwO
— OptaJose (@OptaJose) September 21, 2019
En fin, que esto es fútbol y a lo mejor en un par de días me callas la boca, porque malo no eres, Antoine, y podrás hacer un baile de los tuyos o lanzar confeti como LeBron (supongo que lo preferirás al abrazo que no te dieron tus nuevos compañeros). Y sí, puedes ganar títulos, incluso la Champions (acuérdate de meter el penalti si os pitan uno a favor en la final… aunque en el Barça no creo que lo tires tú). Pero recuerda que para comer en la mesa de las superestrellas, ninguna camiseta te puede quedar grande.