No creo que haya un programa, a día de hoy, en el que me sienta más a gusto. Y, sin embargo, fue PÁNICO lo que sentí la primera vez que me invitaron a ocupar una silla en el plató de Pasapalabra, con mi nombre -por si no quedaba ya lo suficientemente claro quién iba a meter la pata en bucle- imantado en el pecho. En la primera prueba, Letra a letra, estaba tan nerviosa que cuando Christian Gálvez me preguntó, con cuatro letras: “palabra malsonante que se come en México”, aquí una que es prosa pura y venía de la palabra “coto”, debutó con un “coño”.
Desde luego, que aquello se come en ese país y en todos.
A partir de ahí, cualquier cosa que dijera ya no podía ser utilizada en mi contra, así que me relajé tanto que pasé a convertirme en una incondicional del programa, gozándolo como la que más y hasta el punto de aparecer casi en nómina.
Con todos ellos he vivido momentos muy especiales. He dado el bote, he despedido el año y mi soltería, disfrazada de Catwoman horas antes de dar el “sí, quiero”; también he encarnado a Eduardo Manostijeras, llena de cicatrices, e incluso he entrado en un 600 a plató, con Fernando Romay al volante (y su cuerpo plegado), enfundada en unas mallas blancas y una peluca azul.
Sin duda, lo más fuerte fue aparecer en las páginas del periódico británico Daily Mail por haber sido la primera concursante en hacer trampas en la historia del programa español Pasapalabra. Lo que no entiendo es cómo no se le había ocurrido antes a nadie hacer uso del Shazam en la pista musical (risas). ¡Ay! ¡Si Christian no me hubiera cazado con el móvil entre los muslos, esos puntos habrían sido para nuestro equipo naranja! Porque esa es otra, yo siempre pertenezco al equipo más dulce, a la izquierda de Chris, el que rompe el hielo cada tarde a las 20:00 horas, en Telecinco.
Aún no concibo cómo a su presentador, a mi amigo Chris, no se le traba la lengua y se le hace un nudo marinero, de lo rápido que habla. Me fascina. Me contó que se cronometraba en sus comienzos para adquirir rapidez. Ahora es capaz de atravesar la jodida barrera del sonido.
Hace una semana volví para enfrentarme a mi prueba más dura, la de defenderme desde mi silla naranja a cada uno de los juegos de Pasapalabra sin perder la voz, recuperada tan sólo 72 horas antes de grabar.
De esta manera, un coche me recogió en casa y me llevó a los estudios Picasso, en Villaviciosa, donde también se hace La Voz, ironías de la vida. En esta ocasión, iba a compartir sudores con unos compañeros de excepción: Carlos Latre, genio y amigo, Víctor Palmero (súper mega ultra descubrimiento) y una melodiosa Diana Navarro. Sergio me acompañaba porque sabía que volvía a sentir el miedo del primer día y temía hablar con voz metálica, como si hubiera inhalado helio, o ronca y rasgada a lo Bonnie Tyler, aunque sin afinar.
La gente en Pasapalabra es todo bondad, lo juro. Desde dirección, pasando por producción, realización, maquillaje y peluquería, sus maravillosas azafatas, un majadero y extraordinario rubio que escribe sobre Leonardo Da Vinci, su adorada regidora, sonido… Con todas las que les he liado -la mansedumbre no es lo mío- y aun así creo que me quieren. Qué cosas.
Estoy deseando que se emita para que veáis lo bien que estuve (por supuesto de sonido, no de respuestas). Como templada con un diapasón.
Larga vida a Pasapalabra y a todos los que lo hacen posible.
Después no os gusta que os digan que las rubias son tontas. Esta es tonta y tramposa, coño.
21 abril 2016 | 10:18
Fuengirola, para que te calles la bocaza.
Las rubias, son ligeramente más inteligentes:
http://www.20minutos.es/videos/ciencia/kvwEGU35-la-ciencia-confirma-que-las-rubias-son-mas-inteligentes/
Y que conste que lo que sucede es que tu argumento es falso, porque si te fijas Adriana Abenia es rubia de bote.
Pero usar el tema de las rubias de una manera tan peyorativa, sólo te convierte en un@ palet@.
Piensa antes de sacar la lengua a paseo, que te corroe la envidia y habla por tí.
21 abril 2016 | 10:30
@Fuengirola ¿ya estas asi de tontico desde por la mañana? ayyy que cruz -_-
21 abril 2016 | 10:31
Nos alegramos de que estés bien, Adriana. A veces la vida nos enseña a golpes que no podemos dar por hecho las cosas que tenemos.
21 abril 2016 | 10:33
Me encantas en la tele y ahora me encanta como escribes
21 abril 2016 | 11:06
Aprovecha, creo que es el único programa en el que te vamos a ver.
21 abril 2016 | 11:29
Está guapo conocer cómo es la gente de tv por dentro.
Ahora bien, lo que más me ha dado al click es eso de compartir sudores. Ohhh.. eso ya es sublime, nueva filosofía que debería crearse, gentes en pelotas metidos en un cuarto frotándose unos a otros para entrar en estado de humaindad absoluta ayyyyy esos refriegues, olores y sabores, porque respuestas de filantropía emotiva amanecerán como respuestas de aceptación corporeo-gingin o así, que a todo se le buscara nombre luego, aunque no lo tenga…. me pido una sala contigo a doscientos graos centrípetos.
21 abril 2016 | 11:32
Mira Adri, lo último de Rihanna, braless dignificando natura femenina, superando los brutales muros de censura con la más suave belleza. A ver si se pega algo por las teles, virus bendito abriendo ventanas a nuevas fronteras.
http://www.taxidrivermovie.com/pictures/rihanna-042016a.jpg
21 abril 2016 | 12:53
Me alegro mucho de tu recuperación!!
Sobre pasapalabra, el concurso esta bien…pero Christian…madre mía! no le soporto!! Desde el minuto uno metiéndose con la gente…claro…según él en plan broma…pero la mayoría de las veces llega a ser ofensico, incluso con los concursantes, que están ahí los pobres nerviosicos perdidos y el otro a reirse de ellos,(se cree mejor q los demás o esa es la impresión que me da… uff…
A mi al principio me caía mejor…pero ahora creo que se pasa…se quiere hacer el gracioso (que no lo es) y acaba metiéndose con la gente….en fin… mira que para una cosa q no se salvamiza de telecirco, va el Christian de listillo.
21 abril 2016 | 16:08
No puede ser. Una chica tan única, tan snob que despide sus posts en francaise (pásate al búlgaro, chica, el francaise está demodé, cualquiera que pase por la esquina te suelta el «avec tout mon amour, así que no te rebajes a ese nivel, te lo recomiendo), un «WELL-KNOWN SPANISH MODEL» (omito carcajadas), tan «modelna», tan guay, simplemente no puede decir «coño».
O bien pensado, sí puede, porque es ella, la única, la exclusiva, la snob que despide sus post en francaise, la «WELL-KNOWN SPANISH MODEL», la «modelna», la guay, y entonces mola decir «coño». Pedazo ídola.
Por favor, que este blog no desaparezca nunca. Se aprende mucho, sobre todo a no ser gilipollas. Gracias, Adriana.
21 abril 2016 | 18:43
Cuando dabas saltitos por las calles como un conejo allá por los tiempos en que te dieron una oportunidad de «reportera cómica» en una de esas cadenas que no recuerdo ya me pareciste tontita. Ahora acabas de confirmármelo y me pareces rematadamente tonta, pero allá yo con mis opiniones.
Lo malo es que sospecho que lo tuyo no es una pose.
En fin, no todo va a ser malo y en tu favor diré, si este post sigue en pie, que al menos no censuras. Al tiempo.
21 abril 2016 | 18:49
No veo que porque esta señora haya pasado un cáncer no se la pueda criticar. Si escribe payasadas para llamar la atención, y sobre todo porque esta Cervantes II que tenemos en plantilla da motivos para ello, es lógico que la gente entre al trapo. Una cosa no quita la otra.
21 abril 2016 | 18:52
Querida Adriana,
Me alegro muchísimo de que ya estés recuperada de tu operación. Eres monísima y, seguramente, también simpatiquísima. Como modelo, has dejado el listón bien alto. Ahora, como escritora, sencillamente no das la talla. Por favor, dedícate a otra cosa. El post es simplemente patético.
Me he partido de risa con tu ironía e inteligencia. Ja, ja, ja…
Nada contra Pasapalabra. Lo mejor de T5.
21 abril 2016 | 19:39
Me alegro de tu recuperación .se que eres muy atlética y disfrutasi de los partidos. Sigue así de alegre. Un amigo
24 abril 2016 | 08:33