Victor Mora. Soy escritor, investigador y activista. Autor de ‘Quién teme a lo queer?’ y ‘Al margen de la naturaleza. Persecución de la homosexualidad durante el franquismo.’ Reivindico la historia de nuestros activismos, llena de solidaridad y aprendizaje. Creo en lo queer como un boceto cargado de posibilidades para la revolución. Cuerpos y afectos a debate. Imaginando cómo podemos (re)pensar la experiencia, la memoria y la esperanza.
Charo Alises. Abogada, cinéfila y activista LGTB. Me gano la vida defendiendo los derechos de la gente. Por vocación me implico en cualquier actividad en defensa de los Derechos Humanos. Aficionada a la música, los viajes, el mar, el chocolate y el cariño verdadero.
Nieves Gascón. Estudié Trabajo Social y ejerzo como tal. Mi gusto por los relatos infantiles se lo debo a mis hijas y a la costumbre de cada noche de un cuento antes de dormir. Soy cuentista en proceso constante de aprendizaje dispuesta a descubrir nuevos relatos que compartir.
Teresa Castro. ARTivista que trabaja por los derechos de las mujeres y del colectivo LGTBI+ a través de cómics, ilustraciones, viñetas y tiras cómicas. Realiza proyectos para diversas ONGs e instituciones en los que fomenta la visibilización mediante el dibujo y las historietas, además de talleres de empoderamiento de mujeres y personas LGTBI+ utilizando la narrativa gráfica. Ha ganado diversos premios de cómics y carteles y se embarca continuamente en nuevos desafíos. Ahora le ha dado por hacer un podcast de cómics sáficos y autoras LBT ¡Ilustrate, ilustraLES!. ¡Qué original es la chica!
Pablo Morterero . Inició su activismo en el asociacionismo juvenil de Málaga en 1987. Fue presidente del Consejo Local de la Juventud de Málaga, responsable de UGT Juventud de Andalucía y presidente del Consejo Andaluz de la Juventud. En el activismo LGTBI, fue presidente de COLEGAS Sevilla y secretario de formación de la Federación COLEGAS de Andalucía, Ceuta y Meilla. Desde 2015 es presidente de la Asociación Adriano Antinoo. Autor de “Las hojas en blanco de la Velilla” (Camas, 2018), biografía novelada sobre la poeta sevillana Mercedes de Velilla y Rodríguez, y coautor (junto a Juan-Ramón Barbancho) de “Lo Personal es Político. Historia del Movimiento Homosexual de Andalucía.”
Tamara Gámez Ramos. Trabajadora social activista, feminista activista, investigadora activista, editora activista, activista por el derecho al techo, la disidencia sexo genérica y todas sus intersecciones. Adicta a la pizza, torpe tecnológica, le fueron retirados varios carnés por manifestar su afecto al reggaetón de los 90. Si fuera un Pokémon sería Jigglypuff
EN MEMORIA DE:
Juan Andrés Teno. Marido, padre y gay. Periodista. Llego al activismo LGTB por la fuerza arrolladora que me regala día a día mi hijo. Especializado en Diversidad Familiar e ideador de proyectos educativos para que todo el alumnado se sienta representado en las aulas.
Y como contrajo el VIH y la hepatitis C?? Porque la hepatitis C en principio se contagia con agujas o transfusiones, es decir, pinchandose droga sin las medidas de higiene necesarias.
A mi realmente los drogadictos no me dan mucha pena, se lo buscaron ellos.
Suponen un gasto enorme para la sanidad, tanto sus tratamientos para VIH, o hepatitis como los múltiples ingresos por las infecciones que contraen al pincharse. Y ahora aún querrá que le financien los nuevos medicamentos para la hepatitis!
Yo no se si está rehabilitado o no, pero me pregunto si ésta gente que se ha contagiado «a sabiendas», tiene ahora derecho a reclamar nada.
15 febrero 2015 | 12:46
La mayoría de infectados con Hepatitis C fueron contagiados por transfusiones en hospitales en los años 80.
En aquella época no se analizaba la presencia de ese virus.
Tener un accidente de tráfico por ejemplo, podía llevarte a un hospital, recibir una transfusión, y con ella la hepatitis C.
15 febrero 2015 | 19:16
Yam, ¿quieres decir que, entonces y siguiendo tu razonamiento, las personas que fuman no pueden recibir tratamiento contra el cáncer de pulmón, los que comen grasas contra el de colon, los que van a la playa contra el de piel? ¿A que te suena a demagogia,? Pues es la base de tu razonamiento. O eso o que quieres conseguir que se hable de ti.
16 febrero 2015 | 09:41
La honestidad está muy bien, pero claro de honestidad sólo no se vive.
Para vivir hay que tomar responsabilidad con la vida propia y este señor, pues no lo ha hecho nunca.
El, obviamente, es responsable de su drama de salud.
16 febrero 2015 | 11:11